En la madrugada del 27 de marzo se registró una lamentable noticia. Por medio de un comunicado, se informó sobre la muerte del Mayor del Ejército, Juan Pablo Colorado Hoyos.
Según lo indicado, el mayor se habría quitado la vida en el Cantón Militar Nueva Granada, en Barrancabermeja, Santander.
“En la madrugada de hoy, en hechos que son materia de investigación por parte de las autoridades competentes, en el Cantón Militar Nueva Granada, en Barrancabermeja, Santander, falleció el Mayor Juan Pablo Colorado Hoyos, quien habría atentado en contra de sí mismo”, señaló la institución.
Una vez se conoció el hecho, la institución procedió a informar a la Fiscalía General de la Nación para dar inicio a la respectiva investigación y establecer las circunstancias de tiempo, modo y lugar en el que ocurrió el lamentable hecho.
“El comando de la Segunda División lamenta profundamente la muerte de nuestro oficial y hace extensivas las más sinceras condolencias a sus familiares y seres queridos, poniendo a su disposición el equipo médico y psicosocial de la unidad militar para afrontar este difícil momento”. De igual forma, el comando dio inició a la indagación disciplinaria correspondiente.
SEMANA se contactó con la entidad, sin embargo, hasta el momento “todo es materia de investigación”.
Es preciso mencionar que el Ejército Nacional tiene en sus filas a cerca de 230.000 uniformados que, a diario, se enfrentan a situaciones difíciles y extremas, además armados. Es por eso que la institución ha diseñado plantes de contingencia y proyectos enfocados a preservar la salud mental de los militares.
A pesar de que en 2021 bajó considerablemente la tasa de suicidio en la institución, es un problema que sigue aquejando a la población.
De acuerdo con el Observatorio de Salud Mental de la Dirección de Sanidad, Disan, a través de vigilancia epidemiológica y la revisión de presuntos casos en la entidad, se determinó que las decisiones de quitarse la vida estuvieron asociadas principalmente a problemas en relaciones de pareja, con un 35 %; problemas económicos en el núcleo familiar, con un 27 %; y ausencia de estrategias de afrontamiento. “Un 20 % no guardó relación directa con la labor o función militar, y más bien (obedecieron) a casos fortuitos, como momentos de ira, impulsos o problemas emocionales y personales”, señala el informe.
Por otro lado, el estudio señaló que en las estadísticas se evidencia que los militares heridos por sus propios compañeros con armas de fuego, desde 2018 ha evidenciado un descenso considerable en estas novedades. Se pasó de 8 casos en el 2018, a 3 en 2019, uno en 2020 y uno en 2021.
En cuanto a lesiones también con arma de fuego, pero infringidas por el mismo afectado de manera accidental, se pasó de 76 en el 2018 a 65 en el 2021.
El tema afecta a todo el mundo, de hecho, en Chocó se prendieron las alarmas por el aumento de suicidios en el departamento, especialmente de jóvenes y mujeres.
De acuerdo con la organización, en lo que va corrido del año 20 jóvenes han decidido quitarse la vida y 18 lo han intentado pero han sobrevivido, explicó Noticias Caracol.
Según la información oficial, los casos se registran en zonas del Bajo Atrato, Baudó y Medio San Juan y estarían relacionados con la violencia y el intento de reclutamiento por parte de los grupos armados ilegales en la zona.
Es preciso mencionar que los suicidios se dan en zonas donde hay una fuerte presencia del ELN y el Clan del Golfo y es donde los menores son más propensos a ser víctimas de reclutamiento y violencia sexual.
Además, de acuerdo con el coordinador de Derechos Humanos de la mesa indígena del departamento, los casos se presentaron en el Bajo Atrato, en el municipio de Riosucio, Carmen del Darién, Unguía y Acandí. También ha habido intento de suicido.