Los estudios del tratamiento contra el coronavirus que reduce la carga viral en las personas infectadas, desarrollado por el médico barranquillero especialista en medicina interna Carlos Riveros fueron autorizadas por el Invima e iniciaron este lunes.
Según el doctor, el tratamiento saldría primero para Barranquilla y posteriormente se distribuirá en otras partes del país y del mundo.
El médico de la Universidad Militar Nueva Granada, quien lleva varios años radicado en Estados Unidos, reveló que tras la muerte de uno de sus pacientes por covid-19 y ante el miedo de que tanto él como algún miembro de su familia resultaran contagiados, sintió “impotencia” al reconocer que el tratamiento que tantas personas necesitan con urgencia todavía no existe.
“Cuando murió el primer paciente que tuve acá con covid-19, a quien llevaba más de ocho años atendiendo, mis compañeros y yo nos sentimos muy impotentes porque no sabíamos qué hacer. No había ningún tratamiento que sea real y eficaz para casos graves”, señaló.
El doctor Carlos Alberto Riveros tuvo la idea de entender cómo hacer funcionar los tratamientos que en la actualidad no han dado resultado. “Me dediqué básicamente a los casos de cuando a unos les diagnostican el coronavirus o cuando uno tiene síntomas leves para evitar que esto pasara”.
Riveros explicó que el tratamiento estaría compuesto por dos medicamentos que tienen funciones diferentes: uno de ellos tiene una función antinflamatoria pulmonar y el otro es antiviral.
“La hipótesis desde el punto de vista clínico es que, con este tratamiento, una vez nebulizado y ya en la tercera dosis, la mejoría es de más de un 90 % y esto ha sucedido una y otra vez en 100 % de los casos en que lo hemos dado”, dijo el médico barranquillero.
Según el médico, el tratamiento debería utilizarse desde el primer síntoma como tos seca, dolor de cabeza inexplicable, dolor de garganta, fiebre, pérdida de olfato y gusto.
Según los estudios realizados, no hubo cambios en la función pulmonar y ninguna contraindicación en las pruebas. Además, las personas sanas que recibieron el tratamiento habían mejorado su capacidad vital.
Asimismo, el doctor dijo que “ha habido pacientes de todas las comorbilidades; incluso ahora mismo uno de ellos (...) está en diálisis. Recibe el tratamiento y desde el punto de vista pulmonar le ha ido muy bien”.
Hay que señalar que la financiación del tratamiento sería de US$70.000.
Sin embargo, en Colombia, mientras los tratamientos se empiezan a usar e inicia la vacunación contra el virus, el Pacto Nacional por la Salud y la Vida, con el respaldo de la Federación Médica Colombiana, expidió un documento en el que se hacen algunas propuestas para mitigar el alza de los contagios y evitar la propagación del virus.
Entre las iniciativas se encuentran la activación de la emergencia hospitalaria para hacer uso de toda la red de hospitales públicos y privados, fortalecer la autonomía de gobernadores y alcaldes para que tomen decisiones en sus territorios sin la aprobación del ministro del Interior, dar información exacta sobre la compra y entrega de las vacunas contra el virus, y garantizar los derechos junto al trabajo digno de las y los trabajadores de la salud.
Las propuestas se dan ante la agudización de la crisis sanitaria en el territorio nacional y teniendo en cuenta algunos factores como la ocupación de más del 90% de camas UCI en algunas ciudades, la muerte diaria de 300 personas en el país y la escasez de medicamentos en centros de salud.
A la fecha, 1,9 millones de personas en Colombia se han enfermado de covid-19 y 48.631 han perdido la vida por el virus que apareció en Wuhan (China) en diciembre de 2019.