El ministro de Defensa, Diego Molano, confirmó que el jefe de las disidencias de las Farc, Iván Márquez, se encuentra en un hospital de Caracas y está siendo protegido por lo que llamó “régimen de Maduro”.
Dijo el titular de la cartera de defensa, que se mantienen las operaciones de la fuerza pública en Colombia en contra de sus cómplices, quienes buscan reclutar a los antiguos integrantes de la extinta guerrilla de las Farc.
“La información que tiene inteligencia indica que en esas disputas se presentó una vendetta en donde fue afectada su integridad, está siendo protegido por el régimen de Maduro, y que está en un hospital de Caracas”, añadió Molano.
El caso de Márquez, tiene varios ingredientes. De su ataque tuvieron conocimiento las autoridades colombianas a través de varias interceptaciones que le realizaron a su círculo cercano. En los audios se escuchaba gran alboroto y personas llorando, lo que para los investigadores reflejaba que había algo anormal en la Segunda Marquetalia, grupo que armó el exjefe guerrillero.
Luego se especuló sobre que había sido asesinado, pero al final se confirmó que el escurridizo exguerrillero había sobrevivido. Dentro de la novela se ubica hasta un helicóptero, posiblemente de matrícula venezolana, que habría llegado al sitio del ataque para rescatar a Márquez.
Incluso, en días pasados, el ministro de la Defensa, Diego Molano, aseguró que la información recopilada, revelaba que tropas del Ejército de Venezuela se habían desplazado al lugar del atentado para confirmar o desvirtuar la muerte del exguerrillero. Sobre el caso, el gobierno venezolano ha guardado silencio.
Pero en su más reciente pronunciamiento, el ministro de Defensa, Diego Molano, confirmó que sigue con vida y bajo la protección de las autoridades del vecino país.
Desde Venezuela, el hermetismo es total. En el hospital Militar de Caracas, donde se atienden a los altos funcionarios del gobierno, impera la ley del silencio. Nadie se refiere al tema y a quienes se les preguntan prefieren alejarse rápidamente sin mediar palabra.
SEMANA indagó en Caracas sobre Márquez y fuentes confirmaron que también podría estar en el “hospitalito”, una institución sanitaria de menor tamaño, pero completamente equipada, donde atienden a los altos jerarcas del estamento gubernamental y militar, como el segundo al mando en el Gobierno de Venezuela, Diosdado Cabello, o el ministro Tareck El Aissami.
Ese centro se ubica dentro del Fuerte Tiuna, un cuartel militar de enormes proporciones enclavado en la propia ciudad capital. Llegar a él es imposible para quien no porte una chapa castrense y sea reconocido.
Lo cierto es que el ex jefe de la guerrilla de las Farc, se encuentra vivo y recibiendo la mejor atención médica en Venezuela, como lo dijo el ministro Molano. Las autoridades son conscientes que pedir que capturen a Márquez en Venezuela es echar en saco roto, las nulas relaciones diplomáticas entre los dos países hace que no haya cooperación entre las autoridades de los dos países.
Iván Márquez, como se recordará, desertó del proceso de paz y optó por regresar al camino de las armas. Para ejecutar su plan, se alió con sus antiguos compañeros de la guerrilla, entre ellos los sanguinarios alias El paisa, y alias Romaña, pero también se le unieron Jesús Santrich, entre otros.
Estos excabecillas, fueron cayendo uno a uno en Venezuela. Según las autoridades colombianas, fueron asesinados en guerras de narcotraficantes. Primero fue Santrich y luego Romaña y El paisa. Estos sujetos estaban coordinando la reconfiguración de la guerrilla de las Farc en la Segunda Marquetalia.
Sin embargo, la tarea se les complicó debido a que varios exguerrilleros no acogieron sus propuestas, se mantuvieron en el proceso de paz y otros prefirieron irse con las disidencias de alias Iván Mordisco y Gentil Duarte.