Gran curiosidad causó entre los turistas que visitaron la Quinta de San Pedro Alejandrino en Santa Marta observar al exsenador del Polo Democrático Jesús Bernal Amorocho. Lo particular del caso es que el exdirigente tiene una medida de aseguramiento. Según un juez de Bogotá, tiene el beneficio de detención domiciliaria y debe permanecer en ella con brazalete electrónico, el mismo que como turista cubrió discretamente bajo la media en su visita turística a la capital de Magdalena. La información sobre la situación jurídica del político fue confirmada por el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec). Voceros de la entidad señalaron que tiene una medida de aseguramiento con vigilancia electrónica, lo que podría explicar el por qué del brazalete bajo su media. Al ser consultado por Semana.com, su abogado, Jesús Báez, indicó que entiende que la medida sólo le impide salir del país. Eso supondría que su traslado a esa ciudad no tendría nada de irregular. Sin embargo, el experto penalista Alejandro Sánchez -sin referirse al caso concreto del exsenador Bernal- opina que una medida restrictiva de la libertad que le permita al detenido movilizarse libremente por el territorio nacional sería absurda. Explicó que si el beneficio se concede con base en la legislación del 2007, la restricción impide la libre movilidad, es decir, sólo excepcionalmente podría salir de su domicilio. Si es con base en la legislación actual, el detenido no podría abandonarlo. De cualquier manera, en ninguno de los dos casos podría abandonar la ciudad libremente. Muchos se preguntan con qué criterios se aplica la concesión de la vigilancia electrónica. Se supone que es para permitir que los presos puedan cumplir la orden de privación de su libertad en su lugar de domicilio. Sin embargo, en este caso, el uso del brazalete ha sido diametralmente distinto.