Después de dos semanas, Jesús Santrich se posesionó como representante a la Cámara. El exjefe guerrillero llegó al Capitolio y tomó juramento para asumir la curul que hasta el pasado lunes ocupó Benedicto González. El aval lo firmó el lunes la Comisión de Acreditación de la Cámara de Representantes y horas después, ante su inminente posesión, el presidente Duque le solicitó a la Procuraduría que suspendiera del ejercicio de ese cargo al exjefe de las Farc.
Foto: Guillermo Torres /SEMANA Puede leer: "Cómo puede uno pretender que tengamos un mafioso posesionándose como congresista": Duque Santrich ingresó al Congreso para posesionarse en una de las diez curules que el acuerdo de paz le asignó a la extinta guerrilla de las Farc. Frente a los medios de comunicación, el ahora legislador aseguró que esta misma tarde se presentará ante la Corte Suprema de Justicia, que ordenó su libertad hace dos semanas y mantiene abierta una investigación preliminar por el delito de narcotráfico. Zeuxis Pausias Hernández Solarte tomó juramento ante el primer vicepresidente de la Cámara, Atilano Giraldo y el acta fue leída por Jorge Humberto Mantilla, secretario general de esa célula. El representante y presidente de la Comisión de Acreditación de ese órgano legislativo, Wadith Manzur, radicó el lunes una objeción de conciencia y no participó del acto protocolario.
Su llegada al Capitolio no se había podido dar por el entramado judicial que desde hace un año ha puesto a los cuatro máximos tribunales en una puja con el Gobierno. Hace ya un año y un mes el entonces fiscal Néstor Humberto Martínez sorprendió al país con la captura de Santrich porque, según la DEA, lideraba un plan para enviar 10 toneladas de cocaína a Estados Unidos. La Fiscalía General dijo que se trataba de un delito posterior a la firma de la paz y que por tanto la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) nada tenía que ver. Allí se abrió una batalla jurídica que zanjó la Corte Constitucional al determinar que a la JEP le correspondía verificar que la fecha de la conducta fuera posterior a la firma y que para cumplir esa misión podría ordenar pruebas. Aunque la JEP quedó facultada para solicitar las pruebas, como era de esperarse Estados Unidos se negó a remitirlas y reafirmó que con el indictment era suficiente. Luego de varios ires y venires, la Sección de Revisión de la JEP decidió mantener en favor de Santrich la garantía de no extradición y ordenó su libertad inmediata. El Tribunal para la Paz explicó que no había podido constatar la fecha por carencia de pruebas y pidió a la justicia ordinaria investigar el asunto para que la eventual conducta no quedara impune.
Foto: Partido Farc En ese momento, hace dos semanas, los colombianos vieron la macondiana escena en que guardias del Inpec empujaron a Santrich en su silla de ruedas unos centímetros afuera de la cárcel, para que enseguida agentes del CTI le leyeran sus derechos y lo retornaran a prisión. El exguerrillero asegura que no recuerda nada porque minutos antes, en un baño, se había cortado las venas con una cuchilla de afeitar al conocer el rumor de que Duque declararía la conmoción interior y sin más lo pondría en un avión de la DEA. En contexto: Jesús Santrich recuperó su libertad por orden de la corte El amago de libertad tuvo como telón de fondo la renuncia irrevocable, por razones de dignidad, de Néstor Humberto Martínez y la filtración a los medios de comunicación del famoso video, la llamada prueba reina que demostraría que Santrich sí estaba en negocios de narcotráfico. Luego, el Consejo de Estado produjo un fallo de segunda instancia con el cual confirmó que Santrich tiene investidura de congresista electo para ocupar una de las curules otorgadas a la guerrilla, en virtud del acuerdo de paz. La noticia llegó cuando Santrich esperaba en un calabozo la decisión de si el proceso por su recaptura le correspondía a la Fiscalía ante un juez ordinario o si debía quedar a cargo de la Corte Suprema. Los abogados del exguerrillero alegaron que él, como congresista electo, era un aforado y que, por tanto, la autoridad competente era la corte. Al siguiente día del fallo del Consejo de Estado, la Sala Penal de la Corte Suprema produjo una decisión con la que apartó a la Fiscalía del caso Santrich, anuló la legalidad de su recaptura y ordenó su inmediata libertad.
Foto: Partido Farc A pesar de que a partir de este martes asumirá funciones como congresista, su caso judicial se mantiene en la bruma. Los delitos por los que tendría que responder Santrich ante la justicia son concierto para delinquir con fines de narcotráfico, y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes agravado.