Por el despacho de este abogado, devenido de futbolista y nariñense de corazón, han pasado los casos, los expedientes y las pruebas que serían un deleite para cualquier redacción periodística. La experiencia de Mario Burgos en las audiencias lo convirtieron en un comodín de la Fiscalía en los procesos de mayor relevancia en la administración de Francisco Barbosa.

Fue Mario Burgos el responsable de llevar a la cárcel a Jhonier Leal; conseguir, en tiempo récord, una condena contra los asesinos del fiscal Marcelo Pecci; condenar a una rectora por el acoso a Sergio Urrego, y judicializar a la exdirectora de Extinción de Dominio de la misma Fiscalía. Ahora será el responsable de procesar a Nicolás Petro y su expareja sentimental, Day Vásquez.

El fiscal Burgo fue juez y desde hace nueve años se destaca como fiscal en casos de homicidio, pero su habilidad e interlocución en las audiencias lo han ubicado en otros procesos en los que, como en el caso del hijo del presidente, se advierten hechos de corrupción, lavado de activos y enriquecimiento ilícito.

El país lo vio y escuchó en una audiencia contra Jhonier Leal, por el asesinato del estilista Mauricio Leal, que se convirtió en la diligencia más publicitada de toda la historia quizá porque la virtualidad permitió que llegara a todos los rincones del país. Las frases, los movimientos y hasta los gestos del fiscal Burgos mientras narraba el material de prueba se convirtieron hasta en ejemplo en clases de derecho.

“Colocaste a tu hermano en un estado de indefensión flagrante, dándole a ingerir más de nueve pastillas de zopiclona; utilizaste sevicia realizándole varios golpes antes de introducir el cuchillo. Por tal motivo, Jhonier, eres imputable, sabías que cometer esas conductas estaba prohibido por la ley y, a pesar de ello, quisiste su realización”, dijo Burgos en la audiencia contra Jhonier Leal.

La Fiscalía reveló las pruebas que tiene contra Jhonier Leal. | Foto: Captura de pantalla

Burgos logró, con su particular forma de exponer las pruebas, que muchos procesados aceptaran, en las audiencias preliminares, su responsabilidad por los hechos que investiga el ente acusador. El caso por el asesinato del fiscal paraguayo Marcelo Pecci, en plena luna de miel y en Cartagena, fue ejemplo de experiencia.

Los responsables del crimen fueron cayendo y con el material de prueba recaudado, más la exposición del fiscal Burgos, uno a uno fueron aceptando su responsabilidad, firmando preacuerdos, principios de oportunidad y entregando información relevante para conseguir condenas ejemplares.

Burgos mira de frente a los procesados. Los tutea, los invita a pensar, les pide atención y consigue que reconozcan su responsabilidad. El fiscal se muestra contundente, pero amable con los indiciados, revela las pruebas y les insiste a los procesados que las analicen, que piensen en sus actuaciones, y acepten los cargos. Nada es improvisado, se trata de un trabajo de investigación y experiencia judicial.

Cuando SEMANA reveló los chats, los audios y toda la información que enredó a Nicolás Petro, el fiscal Francisco Barbosa advirtió que la investigación sería priorizada, por eso ubicó a Burgos como encargado de definir la responsabilidad del hijo del presidente Gustavo Petro en los hechos denunciados por Day Vásquez.

Será Burgos quien judicialice, por primera vez en Colombia, al hijo de un presidente de la República en ejercicio. Un hito que tendrá la particular experiencia y pericia del llamado fiscal estrella.