El martes de esta semana se conoció que Jineth Bedoya fue nombrada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como embajadora contra la lucha de la violencia sexual. Distinción que fortalecerá el compromiso de Bedoya para que ese tipo de casos no queden en la impunidad.

Pero no es la única noticia que ha recibido recientemente Jineth Bedoya, ya que hace algunos días se conoció que la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia acaba de revocar la suspensión de pena de 40 años de prisión al exparamilitar Jesús Emiro Pereira, condenado por el caso de la periodista Bedoya. El alto tribunal advirtió que “es un contrasentido que se beneficie de lo probado por la justicia ordinaria mientras lo niega en Justicia y Paz”.

Lo que hizo el alto tribunal, en otras palabras, es revocar la suspensión condicional específicamente de la ejecución de la pena de más de 40 años y 6 meses que se le impuso a Jesús Emiro Pereira Rivera, exintegrante de las AUC, condenado por la justicia ordinaria en 2019 por acceso carnal violento agravado, secuestro y tortura de la periodista Jineth Bedoya Lima.

En ese sentido, la Corte Suprema señala que Pereira Rivera “no cumple con las condiciones para tener este beneficio del proceso de Justicia y Paz sobre desmovilización de paramilitares. Contrario a lo admitido en la decisión de primera instancia, el postulado no ha reconocido su probada calidad de coautor en los delitos perpetrados contra la comunicadora, rehusando en la verdad declarada judicialmente en 2019″.

Una lucha incansable de Jineth Bedoya

En marzo de 2021, el Estado colombiano reconoció su responsabilidad frente al caso de la periodista Jineth Bedoya y le ofreció perdón por el secuestro y abuso en su contra, hechos que ocurrieron en mayo del año 2000.

En diciembre de 2021, después de 21 años se empezó a mover el expediente por el secuestro registrado el 25 de mayo del año 2000. La Fiscalía General de la Nación acusó al dragoneante del Instituto Penitenciario y Carcelario (Inpec) Marco Javier Morales Pinto por su presunta participación en los hechos que rodearon la retención ilegal de la comunicadora, cuando se encontraba realizando un reportaje dentro de la cárcel La Modelo de Bogotá.

De acuerdo, con la investigación de la Fiscalía, el dragoneante tuvo una activa participación en el plan para engañar a la comunicadora mientras estaba esperando ingresar al pabellón para entrevistar al exjefe paramilitar Mario Jaimes Mejía, alias El Panadero, quien supuestamente le iba a contar sobre las actividades ilegales que se adelantaban dentro del establecimiento carcelario.

El funcionario, al parecer, habría sido la persona señalada que recibió a Bedoya en la puerta de entrada puesto que era el encargado del filtro de acceso y, presuntamente, la mantuvo esperando media hora para autorizar su acceso. Según testimonios recolectados, le señaló a la comunicadora que pese a que su ingreso ya estaba autorizado debía esperar la boleta de entrada.

No obstante, se comprobó que el permiso no estaba autorizado ni la entrevista se iba a realizar. La demora se hizo para que Bedoya se quedara sola en la entrada para ser abordada por un hombre armado que la amenazó para subirla a un vehículo rumbo a una bodega.

El secuestro se ejecutó como parte de una retaliación por los reportajes hechos por Bedoya Lima, por actos de corrupción y de extrema violencia que se estaban registrando al interior de la cárcel La Modelo en la lucha que sostenían paramilitares y guerrilleros que estaban privados de la libertad.