El martes en la tarde la Fiscalía dio un paso importante en la investigación de Odebrecht. En un comunicado de prensa hizo público que “con ocasión de las investigaciones que se desarrollan por los actos de corrupción relacionados con la adjudicación del contrato Ruta del Sol 2 … la fiscal de conocimiento dispuso imputar los delitos de cohecho por dar u ofrecer e interés indebido en la celebración de contratos al doctor José Elías Melo Acosta, quien para la época representaba los intereses de Episol, como parte del consorcio ganador junto a Odebrecht”. Desde hace meses, el nombre del alto ejecutivo había estado relacionado con este proceso. De hecho, la columnista María Jimena Duzán aseguró que existía un documento que acreditaba que “José Elias Melo, quien para entonces se desempeñaba como presidente de Corficolombiana, lejos de haber sido una víctima ingenua de los torcidos de Odebrecht, habría sido su presunto cómplice”. Puede leer: ¿Víctima? Ahora, su vinculación formal a la investigación podría dejar ver que la Fiscalía está dispuesta a abrir un nuevo capítulo en relación con el escándalo de Odebrecht: el de los socios del proyecto. Melo tendrá que presentarse a la justicia el próximo 5 de julio. La imputación a Melo genera conmoción en el mundo empresarial. El abogado javeriano tiene una larga trayectoria en el servicio público: fue funcionario del Banco de la Republica, secretario de la junta monetaria, viceministro de Hacienda de Rudolf Hommes en el Gobierno de Gaviria, superintendente Bancario y ministro de Trabajo y seguridad social. En el sector privado, fue dirigente gremial como presidente del sector cooperativo y de ahí pasó a presidente de Megabanco, una entidad que se fusionó con el Banco de Bogotá. En los últimos años trabajó en la organización Sarmiento Angulo como presidente de Corficolombiana. De ese organismo renunció hace un año alegando motivos personales. Su salida del conglomerado económico también generó ruido en su momento. El origen de la investigación que adelanta la Fiscalía en su contra está en los sobornos de 6.5 millones de dólares para la adjudicación de la Ruta del Sol 2, que ya fueron admitidos por el exviceministro de transporte Gabriel García Morales. Como se sabe, Corficolombiana, una empresa del grupo Aval, la organización financiera más grande del país, del banquero Luis Carlos Sarmiento, a través de su filial Episol, tenía el 33 por ciento de la Ruta del Sol 2, en la que Odebrecht tenía el 66 por ciento y el grupo Solarte, un 4,9 por ciento. En la Fiscalía, la Procuraduría y la Superintendencia de Industria y Comercio aparece, además de José Elias Melo, el nombre de otra persona que podría tener mucho que contar a la justicia: el ingeniero Mauricio Millán. Le recomendamos: Otto Bula: más cargos y sin negociación a la vistaSemana.com pudo establecer que las firmas de ambos aparecen involucradas a pagos presuntamente irregulares que superan los 16.000 millones de pesos y que fueron girados desde la concesión Ruta del Sol. Dichos desembolsos se habrían realizado en el año 2010, tiempo en el que iniciaba la ejecución del proyecto. Esta investigación se originó por la denuncia de "los tres luises", altos ejecutivos de la firma de ingeniería brasileña, que en el marco del acuerdo de cooperación que comenzaron en Brasil entregaron detalles de sobornos por 11 millones de dólares en Colombia. Este documento “madre”, que lleva la firma de Luiz Antonio Bueno Junior, Luiz Antonio Mameri y Luiz Eduardo Da Rocha Soares, reveló por primera vez cómo habría sido el negocio para que el Consorcio Consol se quedara con la Ruta del Sol, tramo dos. Lo que el documento dejó claro desde el comienzo, y sobre el tema ya existe una sentencia judicial, es que fue el mismo exviceministro de Transporte Gabriel García Morales, el que exigió el pago de la coima a cambio de acomodar el pliego de requisitos para que quedara a la medida de un solo oferente. El pago de los 6,5 millones de dólares fue autorizado desde Brasil y las transacciones están en manos de la Fiscalía. Puede leer: Odebrecht: Otto Bula, la Ruta del Sol y el chef del Ñoño ElíasSin embargo, la denuncia añadió un ingrediente adicional. Luiz Bueno manifestó que el pago del soborno fue consultado con José Elías Melo, entonces presidente de Corficolombiana y que este en respuesta autorizó a "actuar en la forma referida por García Morales”. Detalla que acordó con Melo que después dividirían los costos a lo largo del proyecto, lo cual tendría lugar únicamente entre Odebrecht y Episol (de Corficolombiana), sin dar participación a CSS Constructores, el grupo de Carlos Solarte. Aparentemente, este no tenía conocimiento del acuerdo. Según la declaración, no se informaba a Solarte en tanto la participación de ellos era irrelevante. Las declaraciones de MartorelliEste portal conoció que el exrepresentante de Odebrecht en Colombia, Eleuberto Martorelli, señaló a José Elías Melo. Según el ejecutivo brasileño, Melo supo en el año 2013 de la contratación de un lobbista para acelerar la entrega del otrosí Ocaña- Gamarra a favor del consorcio. Martorelli precisó al respecto que Melo no se enteró que se trataba de Otto Nicolás Bula, ni tampoco se llegaron a concretar los pagos de los honorarios de manera conjunta. Martorelli aclara que no sabe qué gestión haya hecho Episol o los Solarte por su cuenta para lograr quedarse con la cuestionada adición. Puede leer: Cuando José Elías Melo creía que la Ruta del Sol era un buen negocioEl exrepresentante de Odebrecht en Colombia, se queja de que ellos mismos denunciaron y colaboraron para lograr el desmantelamiento de los sobornos, y hoy están bloqueados financieramente y ad portas de ser expulsados del país. Alega que tuvieron como socio al más poderoso grupo de Colombia, que ahora se presenta como víctima. El grupo Sarmiento Angulo ha explicado que ni la junta directiva de Corficolombiana ni la de Episol estuvieron al tanto ni participaron en los actos de corrupción que se dieron entre Odebrecht y algunos servidores públicos alrededor del contrato. Hasta el momento, no existen indicios que apunten a que aparte de Melo otros directivos de esa organización tenían conocimiento del tema. Puede leer: Así nació (y crece) el escándalo Odebrecht en BrasilLuis Carlos Sarmiento Gutiérrez, presidente del grupo Aval, reiteró en la pasada Asamblea de Accionistas que la organización no tuvo conocimiento de las irregularidades cometidas en relación con la Ruta del Sol y con el caso específico de los sobornos en relación con su socio, Odebrecht. Agregó que el escándalo les ha causado no solo la terminación del contrato sino una pérdida económica importante que supera los 100.000 millones de pesos. La declaración de Luiz BuenoEl origen de la relación entre Odebrecht y Corficolombiana la detalló Luiz Antonio Bueno Junior, quien estuvo hasta finales de 2012 en el país como director y superintendente de Odebrecht en Colombia. En sus manos estuvo la responsabilidad de dejar la licitación Ruta del Sol 2 adjudicada al consorcio y en ejecución. En su declaración, Bueno Junior aseguró ante las autoridades colombianas que a su llegada fue él quien empezó a presentar la empresa a los bancos, gobiernos y otras compañias. Por ello, buscó en 2009 a los directivos del Grupo Aval y se reunió con dos vicepresidentes.Bueno explica que como resultado de ese trabajo de acercamiento a la banca, salió la idea de unirse a Corficolombiana para licitar juntos en Ruta del Sol. Y fue por recomendación de esta empresa nacional que buscaron a un socio local constructor, por lo que incluyeron a Carlos Solarte. Él tenía equipos y puso una pequeña participación. Puede leer: Odebrecht sigue enlodandoAmilton Hideaki Sendai, ingeniero de Odebrecht desde el año 1994 y director de Ingeniería en Colombia asesoró al presidente de la firma en la obra y al director del contrato. En su declaración identifica a una decena de personas que participaron por parte de Episol en la estructuración del proyecto Ruta del Sol 2.Allí reconoce a Mauricio Millán como el ingeniero que hacía parte del equipo. Este portal pudo establecer que el testimonio de Millán ante las autoridades es determinante para el proceso pues este habría señalado en su momento que había pagos que no correspondían con la realidad del contrato. Semana.com intentó comunicarse con el ingeniero Millán, sin embargo, no fue posible obtener una respuesta.El llamado a imputación de la Fiscalía a Melo seguramente será interpretado como un acto de independencia del fiscal general. Como se sabe Néstor Humberto Martínez fue asesor del grupo Aval, y por cuenta de esto ha sido criticado, en especial por el senador Jorge Enrique Robledo, quien considera que no debería estar al frente de la investigación de su antiguo cliente. Después de la primera condena por Odebrecht en Colombia, las autoridades le apuntan a que este primero de junio, cuando se levante el acuerdo de confidencialidad en Brasil por las delaciones de los altos ejecutivos, el país tenga claro qué pasó.