El exministro del Interior abandonó su cargo el pasado mes de mayo, pero dejó una asignatura pendiente, nada fácil de aprobar. Dejó en manos del Congreso la reforma política, uno de los compromisos del acuerdo de paz entre el Gobierno y las Farc. Cuatro meses después, Juan Fernando Cristo es precandidato presidencial, y desde esa condición acusa a los partidos políticos de no querer cambiar las reglas de juego para depurar el ejercicio de la política.“Lamentablemente, en estos cuatro meses han descuartizado la reforma política”. Cristo se refería a que el proyecto que se tramita en el Congreso es muy diferente al que propuso en el mes de mayo, cuando el presidente Santos lo puso en el dilema entre liderar el proyecto y garantizarle la gobernabilidad en el parlamento, o sus aspiraciones políticas. La balanza se inclinó a lo segundo. Dejó a mitad de camino su tarea, y mientras la reforma parece naufragar en la Cámara de Representantes, recorre el país en campaña de cara a la consulta del partido Liberal.En contexto: Reforma política: en las listas está el secretoPara el exministro, el tiempo se agotó para que el Congreso lo apruebe. Sobretodo cuando el próximo 30 de noviembre se vence el término del procedimiento legislativo especial, o fast track, periodo en el que el proyecto debe ser discutido en tres debates. Este miércoles empezó la votación en la plenaria de la Cámara.“Es lamentable que haya esa falta de voluntad política de los partidos para sacar esa reforma (política), indispensable hoy para mejorar el sistema política de este país, y para combatir con eficiencia la corrupción”, explicó Cristo.Le puede interesar: Políticos con prontuario que siguen conquistando votosTras augurarle el fracaso al proyecto que redactó y presentó, sumados a los dos intentos fallidos por hacer una reforma a la justicia, Cristo aseguró que se agotaron los mecanismos ordinarios (el Congreso) para adelantar esas reformas, por lo que abrió las puertas a una asamblea Constituyente. “Ese será tema de debate en la campaña y un asunto para el próximo Gobierno”.Como ministro del Interior, Cristo salió en más de una oportunidad a rechazar las voces que pedían una Constituyente, ahora no solo se muestra partidario, sino que se baja de la reforma política, de la cual había sido su padre.Incluso, Rodrigo Lara, presidente de la Cámara de Representantes, bautizó la reforma política como Ley Cristo, al asegurar que solo le interesaba al exministro para armar una coalición de izquierda. El exministro no quiso entrar en esa controversia, pero coincidió con Lara en que esta reforma ya no le interesa a nadie. “En cuatro meses la descuartizaron”, insistió.Le recomendamos: Piden a Rodrigo Lara apartarse de la presidencia de la CámaraLas declaraciones del precandidato presidencial del liberalismo se produjeron cuando la Cámara de Representantes había votado más de cincuenta impedimentos de congresistas, que como tienen aspiraciones electorales, querían abstenerse del debate que modifica las reglas de juego para las próximas elecciones. El Centro Democrático pidió archivar el proyecto, pero su solicitud fue negada.