En menos dos meses, ante la Corte Suprema de Justicia, la defensa del exgobernador de Antioquia Luis Alfredo Ramos al igual que la Procuraduría, presentarán sus alegatos finales dentro del juicio en su contra por parapolítica. El 2 de marzo, el proceso que alejó a Ramos de su candidatura a la Presidencia habrá concluido y será la Sala Penal, en un fallo proyectado por el magistrado Eyder Patiño, la que dé el veredicto final sobre uno de los golpes judiciales más duros contra el uribismo.Ya han pasado más de cuatro años después de la captura de Ramos y mientras la Corte estudia su proceso, de manera paralela la justicia avanza en otro frente: el de los falsos testigos que testificaron contra el exgobernador. En diciembre Ramos fue dejado en libertad por la Corte. Y apenas pocas semanas antes de la última audiencia, un juzgado de Medellín decidió imputar cargos por falso testimonio y fraude procesal contra otro de los testigos claves en este proceso. Se trata de Juan Carlos Sierra, más conocido como “El Tuso Sierra”, el narco que se coló en el proceso de desmovilización de los paramilitares y que fue extraditado a Estados Unidos donde finalmente terminó negociando una pena de 5 años de prisión. Puede leer: "El país está desenmascarando a los falsos testigos: Luis Alfredo Ramos"“Esto representa una conspiración contra mí, conspiración basada en falsos testimonios de reconocidos delincuentes que buscaban prebendas con la justicia, es decir, engañar a la Corte para perjudicar mi buen nombre y obtener rebajas de pena. Hacen parte de la fábrica de falsos testigos”, indicó Ramos.Desde el 2013 el “Tuso” Sierra recuperó la libertad y por medio de un permiso especial concedido en el marco de la negociación se quedó, junto con su familia, en Estados Unidos. Ramos ante la Corte Suprema de Justicia negó haberlo conocido y desmintió la versión de Sierra que dice que aportó 10 millones de pesos para su campaña al Congreso en el 2002.El “Tuso” Sierra, que desde Estados Unidos se convirtió en el "ventilador" contra altos personajes políticos, fue llamado varias veces por la Fiscalía para que ratificara y ampliara las declaraciones que dio desde una cárcel en Virginia. Sin embargo, no se presentó. En diciembre del 2015, la Corte Suprema de Justicia excluyó a Sierra de los beneficios de la Ley de Justicia y Paz al considerar que es un narco puro y no un paramilitar.Este nuevo caso contra Sierra es uno de muchos que afronta en Colombia, tiene pendientes por financiación del terrorismo, tráfico de estupefacientes lavado de activos, porte ilegal de armas y utilización ilegal de equipos de comunicación. Sin embargo, todos quedaron en el limbo por cuenta de la negociación con Estados Unidos.Le recomendamos: "Luis Alfredo Ramos, libre"Los falsos testigos contra RamosEl mes pasado el juez 16 de conocimiento de Medellín condenó a Carlos Enrique Areiza Arango, un polémico personaje que, según la Fiscalía, cobraba importantes sumas de dinero a cambio de no testificar contra una persona determinada sobre la cual tenía supuestas pruebas.Areiza también había testificado contra Ramos y fue condenado a ocho años de prisión por el delito de extorsión agravada.Entre las mentiras de Areiza que descubrió la Fiscalía está la declaración a través de la cual dijo ser muy cercano a la casa de los hermanos Fidel y Carlos Castaño, y que en el año 1992 estuvo en una reunión donde supuestamente le entregaron a Ramos 800 millones de pesos para su campaña política, de lo cual, según él tenía videos con un celular.La Fiscalía encontró que para la época Areiza tenía 11 años de edad, con lo cual era imposible que una estructura criminal le diera responsabilidades de ese calibre. Puede leer: "El falso testigo que enredó a Luis Alfredo Ramos"En este caso, también se cuestiona el testimonio de Mauricio de Jesús Palacio Tejada, quien está prófugo de la justicia, estaría en Chile y es juzgado en contumacia.De esta manera, uno de los procesos que más cuestionados por el uribismo entra en su recta final en la Corte. La decisión final se tomaría a mediados de este año.