La ruptura entre el expresidente César Gaviria y el precandidato presidencial Alejandro Gaviria sigue dando de qué hablar.
El senador Luis Fernando Velasco, uno de los grandes opositores al oficialismo del Partido Liberal, aprovechó este lunes para analizar con cabeza fría lo ocurrido entre ambos.
Velasco confesó a SEMANA que se sintió extrañado con el rompimiento. Él, según dijo, es testigo de la buena relación entre el expresidente y el exministro de Salud de años atrás. Incluso, recordó que el hoy jefe del Partido Liberal se convirtió en su padrino durante bastantes años.
“Lo que empieza mal termina mal”, concluyó Velasco. “Alejandro Gaviria, cuando el liberalismo le decreta la oposición a Álvaro Uribe, le acepta al señor expresidente Álvaro Uribe no solo ser su subdirector de Planeación Nacional, sino el hombre que organiza sus muy exitosos consejos comunitarios. Y luego, más a nombre de César Gaviria que del Nuevo Liberalismo, da una primera voltereta y termina siendo el ministro de Salud de Juan Manuel Santos para enfrentarse a un sector del liberalismo que pedía una reforma más radical a la salud, y después de siete años no la hizo”, contó el senador liberal.
Alejandro Gaviria, según él, llegó a la precandidatura presidencial empujado por las redes sociales y opinadores de la alta alcurnia bogotana, se lanzó a la presidencia en un evento organizado por las juventudes liberales, “pero como en su momento lo hizo Pedro, negó tres veces al liberalismo y se disfrazó de independiente”.
Velasco trajo a colación el refrán de los galleros de la Costa para referirse a Gaviria. “Alejandro Gaviria terminó enredado en sus propias espuelas y hoy debe arrancar de nuevo buscando que, quienes antes le habían cerrado la puerta (la Coalición de la Esperanza) se la abran de nuevo”.
La candidatura del exrector de Los Andes -a juicio del senador caucano- “está en estado crítico y necesitará más que ibuprofeno”.
La ruptura entre César y Alejandro Gaviria llevó al senador a concluir que este es el momento del liberalismo. “Tiene que dar un paso audaz, recordar su historia que ha sido opción de poder, de cosas audaces como las que hizo Alfonso López Pumarejo cuando se unió con la izquierda, José Hilario López al abolir la esclavitud, Tomás Cipriano de Mosquera cuando recuperó la tierra en poder de la Iglesia para ponerla a trabajar”.
Es decir, Velasco insiste que es el momento en que el Partido Liberal tenga un candidato propio y compita en marzo de 2022 en el Pacto Histórico de Gustavo Petro, un sector político en el que él está desde hace meses y desde donde busca congregar a atractivas figuras liberales en torno a la izquierda, como Luis Pérez.
A escasos cuatro meses de las consultas interpartidistas, Velasco cree que perdieron Alejandro Gaviria y el expresidente César Gaviria. “Uno perdió por disfrazarse de independiente, cuando todos sabíamos que no lo era, y el otro por poner a su militancia a recoger firmas para quien estaba negando su tradición liberal”, dijo. Concluyó que esa ruptura no fue una traición. “Ambos se enredaron en sus propias mentiras”.
En octubre de 2021, Luis Fernando Velasco hizo un primer balance de la campaña del académico y desde esa época la veía en estado crítico, según los resultados de las más recientes encuestas. “Lo veo en estado crítico y su ‘médico’ César Gaviria solo le da ibuprofeno”, aseguró.