El país conoció la grave y fría confesión de Nicolás Petro en la Fiscalía, a través de SEMANA. El explosivo testimonio compromete al presidente Gustavo Petro y su campaña, a Verónica Alcocer, Laura Sarabia, Agmeth Escaf, Pedro Flórez y los empresarios Euclides Torres y Cristian Daes, entre otros.
La defensa jurídica del hijo del presidente se pronunció a través de un comunicado en los siguientes términos:
“El país observó que, mediante un exceso de fuerza, el doctor Nicolás Petro Burgos fue capturado y trasladado de Barranquilla a Bogotá, para realizar una audiencia virtual”, dijo el abogado Diego Henao.
Y aunque el juez ordenó la libertad de Nicolás Petro por su compromiso de colaborar ante la justicia, para lo cual rindió un interrogatorio con graves revelaciones, Henao asegura: “la fiscalía delegada no tuvo los elementos para sustentar la medida de aseguramiento que pretendía y, por el contrario, el juez de control de garantías constitucionales que llevó a cabo la referida audiencia ordenó la libertad inmediata del doctor Nicolás Petro Burgos”.
El hijo del presidente no fue esposado tras su captura. Ya en Bogotá, el país fue testigo de que Nicolás fue llevado al Búnker de la Fiscalía y allí gozó de comodidades que difícilmente tiene un detenido en Colombia.
Le acondicionaron una oficina para él solo y no lo internaron en los calabozos. También le pidieron comida a domicilio y le permitieron tener celular. Sin embargo, el abogado Henao argumenta contra las evidencias: “Quiero destacar que, así como el juez de control de garantías constitucionales, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha cuestionado que la Fiscalía General de la Nación a través de algunos de sus delegados use las solicitudes de medidas de aseguramiento o la custodia de procesados en sus sedes, para presionar y lograr confesiones y negociaciones coaccionadas”.
El video de la confesión de Nicolás Petro revelado por SEMANA evidencia que Nicolás Petro siempre estuvo con su abogado en ese momento, David Teleki. Además, se veía tranquilo, respondía calmadamente y les proponía hechos relevantes a los fiscales que lo interrogaban durante toda la diligencia. Esto sin contar que cuando fue preguntado por la Fiscalía si había llegado presionado dijo que no.
Hoy el abogado del hijo del presidente, sin embargo, afirma: “Estas prácticas cuestionables han sido consideradas en el mundo jurídico, y refrendadas por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), como formas modernas de tortura porque se somete al procesado a juicios mediáticos, custodias, capturas, traslados y otros mecanismos de presión física y psicológica que lo obliga a negociar con su libertad, aceptando incluso delitos no cometidos”.
Es evidente que Nicolás Petro no fue presionado ni “doblegado”. En entrevista con SEMANA dijo: “No me voy a inmolar por mi papá”, pero una visita del presidente Gustavo Petro le cambió el rumbo a Nicolás y decidió echar al traste su colaboración. La pregunta es realmente: ¿quién presionó a Nicolás?, ¿su papá, el presidente?
El pronunciamiento lo hizo el abogado Diego Henao Vargas, quien asumió como nueva defensa de Nicolás Petro en el campo penal luego de la renuncia del abogado Diego Teleki.
Así fue la financiación de la campaña
Es de recordar que, en algunos apartes del interrogatorio revelado por SEMANA, Nicolás Petro reveló cómo el megacontratista Euclides Torres financió desde la compra de gorras y camisetas, pasando por millonarios eventos políticos, hasta la adquisición de un sofisticado software para proteger los votos de la campaña presidencial de su papá, el hoy presidente Gustavo Petro. Los fajos de dinero de los que habló el hijo del presidente salpicaron a la primera dama.
Tras aceptar que se encontraba de manera voluntaria, libre y consciente en la diligencia con la Fiscalía, el hijo del presidente Gustavo Petro, Nicolás Petro, reveló los secretos desconocidos sobre el mecanismo de financiación y logística que se utilizó para la campaña presidencial en la costa Caribe que llevó al entonces senador a la Casa de Nariño.
Nicolás reveló los millones que tuvieron que pagar por algunos de los eventos políticos y quién fue el financiador principal y sus intermediarios.
Para describir la magnitud de los ríos de dinero que comenzaron a correr en la costa Caribe para la campaña de su padre, el hijo del presidente puso como ejemplo el megaevento político en la plaza La paz de Barranquilla, que se llevó a cabo el 10 de septiembre del 2021, que fue muy polémico y donde prácticamente arrancó la campaña presidencial; en el sitio los cerca de 10.000 asistentes formaron una P.
Nicolás reveló que el financiador, de los más de 300 millones de pesos que se estima costó el evento, fue el contratista Euclides Torres, quien llegó a la campaña por medio del exembajador Armando Benedetti.
“Nosotros nos reunimos en una oficina en la ciudad de Barranquilla, en esa oficina diseñamos la estrategia de la manifestación política y ahí es cuando yo conozco al señor Euclides Torres”, detalló Nicolás.