“¡Que cese el fuego!”. Esta frase pronunciada el 6 de noviembre de 1985 por el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Alfonso Reyes Echandía, a modo de súplica para que el presidente Belisario Betancur suspendiera la operación de recuperación y entablara un diálogo con los guerrilleros del M-19, estará en la placa conmemorativa que será instalada el próximo 4 de noviembre en medio de una nueva conmemoración del Holocausto del Palacio de Justicia.
Mientras sonaba una ráfaga de balas y los gritos de los rehenes de fondo, Reyes Echandía, en una corta entrevista con un medio de comunicación, pidió que se le divulgara el mensaje para que el “presidente de la República de finalmente la orden del cese al fuego inmediatamente”.
Tras pronunciarla, Alfonso Jacquin Gutiérrez, comandante del M-19, tomó el teléfono para reclamar la actitud de Betancur: “El presidente de la República no le ha pasado al teléfono al presidente de la Corte y se va a morir, porque el presidente ni siquiera con su poder jurisdiccional, el M-19 no es el que se tomó el Palacio, se lo tomó el Ejército con sus tanques, cuando entren a este piso nos morimos todos”.
El clamor del presidente de la Corte Suprema nunca fue escuchado, jamás pudo comunicarse con Betancur ni con ningún representante del Gobierno.
La placa conmemorativa, que será ubicada en el aniversario 37 del Holocausto, tendrá además la siguiente leyenda: “Evocamos a quienes el horror de la guerra y la barbarie les arrebató la vida. Su recuerdo, por siempre enlazado a los hechos trágicos cometidos contra la justicia el 6 y 7 de noviembre de 1985, permanece en nuestra memoria, con la esperanza de que nunca se vuelvan a repetir”.
Tras la toma del Palacio se registró la desaparición de once personas: siete empleados de la cafetería, tres visitantes ocasionales y la guerrillera Irma Franco Pineda. Con el pasar de los años, se determinó que muchos magistrados salieron con vida de la edificación en compañía de miembros del Ejército Nacional.
“A ellos, a los sobrevivientes y a las personas que no han podido ser identificadas como víctimas, este sentido homenaje”, completa la leyenda que reza en la placa que será instalada en la sede del Palacio de Justicia, en pleno centro de Bogotá, que lleva el nombre del magistrado Alfonso Reyes Echandía.
En la lista de víctimas, sobrevivientes y desaparecidos se encuentran:
- Alfonso Patiño Rosselli.
- Alfonso Reyes Echandía.
- Ana Beatriz Moscoso de Cediel.
- Ana Rosa Castiblanco Torres.
- Aura María Nieto de Navarrete.
- Bernardo Beltrán Hernández.
- Blanca Inés Ramírez de Angulo.
- Carlos Augusto Rodríguez Vera.
- Carlos Horacio Urán Rojas.
- Carlos José Medellín Forero.
- Carlota Sánchez de Mansalve.
- Cecilia Concha Arboleda.
- Cristina del Pilar Guarín Cortés.
- Daría Velásquez Gaviria David Suspes Celis.
- Edgar Gerardo Díaz Arbeláez.
- Emiro Sandoval Huertas.
- Eulogio Blanco.
- Fabio Calderón Botero.
- Fanny González Franco.
- Gloria Anzola de Lanao Gloria.
- Stella Lizarazo Figueroa.
- Gustavo Ernesto Ramírez Riveras.
- Héctor Jaime Beltrán Fuentes.
- Hermógenes Cortés Nomelín.
- Isabel Méndez de Herrera.
- Jaime Alberto Córdoba Ávila.
- Jaime Benitez Prieto.
- Jorge Alberto Echeverri Correa.
- Jorge Tadeo Mayo Castro.
- José Eduardo Gnecco Correa.
- José Eduardo Medina Garavito.
- Julio César Andrade Andrade.
- Libardo Durán.
- Libia Rincón Mora.
- Lisandro Juan Romero Barrios.
- Lucy Amparo Oviedo de Arias.
- Luis Horacio Montoya Gil.
- Luis Humberto García.
- Luz Estella Bernal.
- Marín Luz Mary Portela León.
- Manuel Gaona Cruz.
- María Cristina Herrera Obando.
- María Isabel Ferrer de Velásquez.
- María Lyda Mondol de Palacios.
- María Teresa Barrios Rodríguez.
- María Teresa Muñoz de Jiménez.
- María Yanneth Rozo Rojas.
- Norma Constanza Esguerra Forero.
- Nury Esther de Piñeres de Soto.
- Pedro Elías Serrano Abadía.
- Plácido Barrera Rincón.
- Ramón León Ariza.
- René Francisco Acuña Jiménez.
- Ricardo Medina Moyana.
- Rosalba Romero de Díaz.
- Ruth Mariela Zuluaga de Correa.
- Saúl Chavarría Salamanca.