En octubre de 2020, en Bogotá, Miguel Camilo Parra se convirtió en un intento de feminicida. Lo hizo luego de atacar con un hacha a quien era su compañera sentimental y en presencia del hijo de la víctima. Por fortuna, la mujer sobrevivió, pero tuvo que aguantar cómo el hombre fue dejado en libertad. Ahora la justicia abrazó la esperanza de la víctima al condenar al feminicida, en grado de tentativa y a 20 años y ocho meses de cárcel.
La Fiscalía logró demostrar que Parra, en un arrebato de celos, se lanzó contra la mujer en medio de una reunión que tenían en su propia casa, que la víctima no recuerda. La atacó con un hacha que tenía de colección y luego huyó del lugar para esconderse en un municipio cercano a Bogotá.
La investigación de la Fiscalía fue minuciosa, al punto que descubrieron el rastro que dejó Parra en su paso y en su fuga. Encontraron las llamadas, las fotos y los videos de cómo pasó por los peajes y cómo, cobardemente, se escondió en una vivienda del municipio de Fusagasugá.
“Durante el juicio, la Fiscalía señaló que el agresor actuó consciente de lo que hacía, al punto que el día del ataque llamó a su mamá y a una tía para que vieran a la víctima. Posteriormente, escapó con el hacha, cambió su apariencia física y se ocultó en Fusagasugá (Cundinamarca), donde fue capturado el 27 de octubre de 2021″, dijo la Fiscalía.
La juez que fijó la condena en contra de Miguel Parra leyó algunas declaraciones que entregó la víctima en todo ese proceso y de cómo conoció al agresor y posteriormente empezaron los ataques, hechos de violencia al interior de la casa que compartían y donde también estaba el menor de edad, hijo de la víctima.
“La Fiscalía General de la Nación acreditó más allá de toda duda que Miguel Parra atacó con medio corto contundente (hacha) en la cabeza de su excompañera sentimental en el inmueble ubicado del conjunto residencial Redil de Castilla y que le generó heridas y puso en riesgo su vida por el hecho de ser mujer, sobre la cual se evidencia la dominación que él ejercía”, advirtió la juez al sentenciar a Miguel Parra.
Las declaraciones que están en el expediente fueron suficientes para que la juez tomara la determinación de condenar al agresor por el violento ataque a la víctima, tanto como para considerar que el monto de la pena es suficiente para garantizar la seguridad de la sociedad y en especial de la víctima.
“En ese sentido, el juez lo declaró responsable del delito de tentativa de feminicidio agravado y ordenó su captura inmediata, la cual hicieron efectiva investigadores del CTI de la Fiscalía en la sala de audiencias donde se cumplió la diligencia”, dijo la Fiscalía al conocer el sentido de fallo en contra del agresor.
La defensa del ahora condenado apeló la decisión y será el Tribunal Superior de Bogotá la instancia encargada de definir la responsabilidad de Miguel Parra, si tumba o aumenta la pena en su contra. La juez le negó a la defensa la solicitud de cumplir esa condena en detención domiciliaria.