Las demoledoras declaraciones, a una fiscal delegada ante la Corte Suprema de Justicia, de María Alejandra Benavides, exasesora del ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, con relación al escándalo de corrupción que representó el saqueo de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), han puesto de nuevo en el ojo del huracán a miembros del Gobierno, y en particular a dos de sus más importantes alfiles.
Tanto el ministro Bonilla, como el entonces ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, resultaron salpicados con las afirmaciones de Benavides, al igual que el enlace entre el Gobierno y el Congreso, Jaime Ramírez Cobo, en torno al trámite de contratos por más de 92.000 millones de pesos para obtener el respaldo de la Comisión de Crédito Público del Congreso.
Sobre Bonilla, la exasesora dijo: “Sí señora, él lo sabía todo, absolutamente todo, necesitaba autorización, todo necesitaba que él supiera. Yo no lo hacía sola”. Y agregó: “El 3 de enero, cuando yo le voy a hablar de la carta, yo le digo: ‘Mire, en diciembre pasó esto, yo mandé los contactos al señor Sneyder’; luego me dijo, la última semana de diciembre, que no se ha movido, que ya habían hablado con ellos, pero que ya”, afirmó Benavides.
Y fue más allá en su declaración: “Él me usó, él me usó, por el hecho de ser el ministro de Hacienda y a él no le importaba el costo que tenía que pagar; él solo necesitaba sacar esto”.
Advirtió que el ministro Bonilla “sabía que esos contactos los había sacado yo de lo que me habían pasado los congresistas que tenían los cupos indicativos (…). Yo no le puedo decir mentiras a usted. Si él sabía, yo no sé, yo no podía cuestionarlo, pero aquí soy transparente y le digo: estoy segura de que el ministro sabía de esos contactos para ellos y que a cambio le iban a dar esos créditos”.
Sin embargo, en su declaración, Benavides también destacó que Bonilla no hacía nada sin que Velasco supiera.
“Sé que el ministro Bonilla no hacía nada sin que el ministro Velasco supiera o Jaime supiera. Para el ministro Bonilla era fundamental que alguien más supiera qué estaba pasando. Por eso Velasco se la pasaba en el Ministerio de Hacienda, por eso él me decía que hablara con Jaime, almuerza con Jaime, era por eso. El ministro Bonilla tenía afán de que de alguna forma quedara claro que él no lo hacía solo”, explicó Benavides.
Sobre el papel del entonces ministro del Interior, la exasesora señaló: “La reunión con Velasco fue el 6 de diciembre, el 11 Jaime trató de meterse, él tenía la instrucción, no lo sé, no sé si era por eso o por qué. Por eso yo hablé con él, por eso yo toda esta semana hablé con él, del 12 al 14, ustedes pueden verlo. Entonces, claro que Velasco lo sabía, claro que ellos tenían presente esto el 16 de diciembre, hasta el sábado había plazo, y los congresistas eran los que todo el tiempo por WhatsApp me decían: allá no contestan, no han dicho nada, María Alejandra no ha pasado nada”.
Benavides añade en su declaración: “El ministro Velasco me llama de celular. María Alejandra, ¿cómo van los temas? Y yo digo, ¿qué está haciendo el ministro Velasco llamándome? Yo le dije: ministro, estoy esperando la instrucción del ministro Bonilla y ya. Estas llamadas fueron registradas en mi celular. No sé si tengan cómo rastrear eso”.
También mencionó una cita el 6 de diciembre: “Yo estaba ahí cuando el ministro me lo pedía. Yo no participaba. Pero Bonilla y Velasco hablaron, el ministro Bonilla dijo: usted tiene que ayudarme, usted tiene que encargarse también. El ministro Velasco (inaudible), Jaime Ramírez Cobo como enlace de la Presidencia y como el enlace más alto respecto a todos los otros enlaces del Gobierno nacional, también tenía que intervenir ante la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo”.
Añadió: “¿Me pueden prestar por favor el chat con Jaime? Jaime sabía de la urgencia, Jaime sabía que tenía que gestionar esos cupos indicativos. Él sabía que tenía que salir y Velasco también, lo tenían clarísimo”.
Bonilla se pronunció este sábado sobre las declaraciones de su exasesora y dijo: “Respeto el trabajo de la Fiscalía y confío en demostrar que eventualmente puedo cometer errores, pero no delitos”.
El presidente Petro también salió a respaldar al ministro Bonilla. “La labor del ministro de Hacienda ha sido buena en momentos difíciles para las finanzas públicas, debidos al intento de ahogamiento fiscal construido por la oposición (sic)”, señaló el jefe de Estado en su publicación en redes sociales, y agregó que su funcionario es víctima de una trampa.