Poco duró la luna de miel del Nuevo Liberalismo luego de que la Corte Constitucional reviviera el partido de Luis Carlos Galán Sarmiento. En tan solo unas semanas las discusiones internas salieron a flote y esto ocasionó grietas irreparables que hasta hoy siguen generando discusiones.

Un grupo de políticos que buscaron volver al Nuevo Liberalismo, porque hace unos años habían militado de la mano de Galán, le enviaron una carta pública a Juan Manuel y Carlos Fernando, hijos del líder asesinado por la mafia en 1989, en la que le reclaman algunas declaraciones que han hecho y aclaran cuáles fueron las razones por las que finalmente no entraron a esa colectividad.

Dicen que inicialmente tenían gran ilusión de conformar una alternativa para estas elecciones, pero que esas decisiones los hicieron apartarse. “Nos entusiasmó la posibilidad de reincorporarnos y contribuir desde allí a la consolidación y unidad del centro político, y más concretamente de la coalición Centro Esperanza, para brindarle así a los colombianos una opción de cambio responsable ajena a los extremismos”, aseguran en la carta.

Mencionan que no habían querido pronunciarse de fondo sobre las razones que los llevaron a dar un paso al costado, pero que con las continúas declaraciones de los hermanos Galán en su contra, con la que han sentido que han sido descalificados, los llevaron a hacer este pronunciamiento y a controvertirlos.

Lo que más les generó disgusto, aseguran, fueron unos mensajes que publicó Carlos Fernando en Twitter en los que responsabilizó directamente a Marulanda de imponer condiciones para integrar a la Alianza Verde, la colectividad de la que saldría. Los firmantes de la carta aseguran que eso “falta a la verdad”.

“No es cierto que hayamos cerrado las puertas del partido a los históricos. En nuestra lista y directivas están varios de ellos. Iván Marulanda pretendía aceptar las condiciones del Verde para la lista y desconocer la sentencia de la Corte Constitucional”, aseguró Carlos Fernando Galán.

Los históricos del Nuevo Liberalismo señalan que esas no fueron las verdaderas razones por las que no ingresaron, sino que supuestamente se debió a que los hermanos estaban “empecinados” en mantener en la dirección del partido a Fernando Galindo -aunque no lo mencionan-, a quien le reclaman por sus decisiones y una supuesta falta de experiencia.

“(La razón) no fue otra que el empecinamiento de los hermanos Galán en mantener como director del partido, en reemplazo de Luis Carlos Galán y con casi todas las amplias facultades estatutarias que este tenía, a un desconocido profesional que no pareciera cumplir función real alguna al ostentar tal dignidad, con el consecuente objetivo de ejercer en forma excluyente el control sobre las decisiones del partido, dejando en una condición irrelevante a la máxima instancia directiva que restableció la Corte”, aseguran.

Además, comentan que el objetivo fue blindar el partido para su uso exclusivo y que eso generó que otros líderes no pudieran ingresar. “Esa es la historia. Con un agravante, y es que al blindar para su uso exclusivo la estructura de la organización, no sólo precipitaron nuestro marginamiento sino que ahuyentaron a muchos otros de vincularse a una organización de la cual tanto se esperaba en la actual coyuntura política”, aseguran.

La carta está firmada por Iván Marulanda, César Pardo, Carlos Arcesio Paz, Arturo Sarabia Better y Alfonso Valdivieso.

Marulanda le contó a SEMANA que las razones para su salida se debieron a que este Nuevo Liberalismo no recogía el legado de lo que habían formado hace unos años. “Las personas que tenemos esa vivencia y fuimos protagonistas de esa historia no tuvimos el espacio dentro de esta nueva etapa a partir de la sentencia de la Corte”, aseguró el senador.

También es de los que cree que el partido lo están manejando los hermanos Galán, a quienes les critica no tener un panorama completo de la historia de la colectividad. “Mucho menos la persona que recibió el encargo de la Corte de la sucesión de Luis Carlos Galán, que es una persona totalmente desconocida para el Nuevo Liberalismo”, dice.

Señala que la decisión de la Corte de haber designado a Fernando Galindo como director “fue una equivocación” porque, para Marulanda, el Alto Tribunal no debía señalar quién debía ejercer ese cargo. “No puede haber en democracia que las cortes digan quiénes tienen el control político y la dirección política de los partidos, eso va contra la naturaleza de la democracia”, afirmó Marulanda.

Critica que Galindo es “desconocido” del Nuevo Liberalismo y no tuvo nada que ver con lo que fue alguna vez el partido. “No sabemos quién es”, asegura, agregando que nunca lo vio militar al lado de Galán Sarmiento. Marulanda menciona que la sentencia de la Corte desembocó en “titularle el partido a una familia”.

“El Nuevo Liberalismo nunca fue un partido de familia, fue una fuerza democrática, un bien colectivo de la sociedad para la construcción de la democracia y no una propiedad privada y lo terminó siendo, bajo una titulación que le otorgó la Corte Constitucional a unas personas naturales”, menciona el senador.

¿Hoy el Nuevo Liberalismo es el partido de la familia Galán Pachón? “Claro, sin duda”, responde Marulanda. Reclama que las designaciones que se hicieron para dirigir las riendas del partido es “una burla a la historia y la figura de Luis Carlos Galán y Rodrigo Lara (Bonilla)”.

Sobre las disputas que se generaron hace unas semanas con Rodrigo Lara Restrepo, quien hace reclamos similares, Marulanda señaló que es “hijo de un mártir” y que por eso siempre ha considerado que el senador tenía todo el derecho de encontrar en esa colectividad un espacio.

“Es censurable e incomprensible que no le hayan reconocido ese derecho y ese espacio en esta etapa del Nuevo Liberalismo”, aseguró Marulanda.

Sobre las razones que argumenta Galán de la salida de Marulanda, supuestamente relacionadas a una influencia sobre listas de la Alianza Verde, dice que es una “calumnia y una infamia”. “Nunca se me pasó por la mente, no sé de dónde sacó eso. No tiene ni pies ni cabeza. Es una demostración de una condición humana que me deja muy perplejo en un hijo de Luis Carlos Galán, eso es absurdo y mentiroso”, responde Marulanda.

Y agregó: “Estos jóvenes no tenían interés de recibir ese legado y que esta etapa correspondiera a esa historia, sino que querían tener un partido de bolsillo, e hicieron todas las manipulaciones para conseguirlo y lo lograron, ahí tienen un partido familiar, una empresa familiar”.

En medio de la carta que enviaron los antiguos militantes dicen que esas decisiones internas generaron que otros políticos, además de Lara Restrepo, no llegaran al Nuevo Liberalismo. Marulanda aclaró que se refieren a Sergio Fajardo, Humberto de la Calle, Gustavo Bell, entre otros que iban a llegar al partido. “Yo personalmente había hablado con ellos y estaban dispuestos a ingresar al Nuevo Liberalismo”, contó Marulanda.