En entrevista con Semana Noticias, Jhon Mycan, enfermero y padre de dos hijos, narró cómo se salvó de morir cuando fue abordado por delincuentes que buscaban robarle su bicicleta. El profesional de la salud recibió ocho heridas con arma blanca, luego de que los ladrones trataran de asfixiarlo.
Jhon Mycan relató que los hechos sucedieron cuando se dirigía desde el municipio de Madrid hacia su casa en Facatativá tras terminar su jornada laboral como enfermero. Indicó que, de un momento a otro, en intermediaciones del sector de Talleres fue abordado por tres sujetos de nacionalidad extranjera que se encontraban caminando por una ciclovía y quienes le dijeron que no le harían daño si les entregaba sus pertenencias.
“No obstante, después de eso me dicen que no me pueden dejar vivo, que porque una denuncia ante las autoridades a ellos no les favorece para nada”, recordó el profesional de la salud, agregando que en ese momento lo arrastraron hacia un cultivo de maíz y, sin mediar ninguna palabra, comenzaron a agredirlo físicamente, dejándolo abandonado y desangrándose.
“Luego de generarme una asfixia mecánica para dejarme inconsciente, me proporcionaron una serie de cortes con un arma blanca tipo machete. Fue una sensación que yo no le deseo a nadie”, mencionó Mycan. “Es desesperante saber cómo pierdes la vida tan fácil a manos de personas inescrupulosas”, dijo.
“Yo creo que ellos pensaron que cumplieron su propósito, pero minutos después por fuerza de Dios yo, no puedo explicarlo de otra manera, me pude levantar de esa imagen tan macabra que percibí y pude correr hasta una estación de gasolina cercana para que me auxiliaran”, aseveró.
Una vez en la estación, el enfermero recuerda que una de las trabajadoras del lugar lo auxilió y le confirmó que las heridas las tenía en el cuello. A su vez, pudo comunicarse con su hermana y con las autoridades que, según él, hicieron presencia “pero nunca más volvieron a aparecer", por ejemplo en el hospital, para tomar una denuncia. “Han pasado cinco días del ataque y no he podido instaurar la denuncia legalmente”, manifestó.
En diálogo con Semana Noticias, Jhon Mycan aseguró que tras el suceso quedó afectado y “destrozado” no solo anímica sino moralmente, además de haberle generado un gran dolor a su familia; añadió a su vez que no ha podido dormir al sentir la presión “como si aun los delincuentes lo estuvieran asfixiando y haciéndole daño”.
Reveló que de los cortes que le propinaron los delincuentes uno le causó una fractura en su mandíbula y que, por poco, le afectan una de las venas más importantes que pudo haberlo dejado sin vida. Le ha sido difícil pasar saliva y su hablar también se ha visto perjudicado. “Estuve muy cerca de no poder contar esto y lo hago es para poder evitar muchos más sucesos que compliquen más la salud e integridad de muchas personas”, dijo Jhon Mycan.
Por otra parte, el profesional de la salud informó para Semana Noticias que ya le fue practicada una cirugía plástica reconstructiva a nivel de su cuello, puesto que las heridas fueron profundas. “Queda pendiente una valoración maxilofacial para descartar una complicación severa en la fractura de la mandíbula”, concluyó.