La fiscal Angélica Monsalve, quien es muy activa en sus redes sociales, no ha dado la cara ante la justicia. En cuatro ocasiones ha presentado excusas para no asistir a la imputación de cargos que le hará la Fiscalía, por lo que en su última ausencia fue solicitado el juzgamiento como reo ausente, decisión que tomará el juez 61 de garantías.
Por ese motivo, hoy, a las 8:00 a. m., está citada nuevamente, no solo para la imputación de cargos, sino para que el juez decida si, ante su renuencia a asistir ante la justicia declara la contumacia y es acusada en el proceso que se lleva en su contra por exigirles millonarios sobornos a empresarios del sector de las camionetas blindadas a cambio de otorgarles beneficios jurídicos y no mandarlos para la cárcel.
Ha sido imposible para la Fiscalía que Monsalve se presente en medio del proceso por corrupción, que está listo para imputarle cargos y que empiece el juicio formal. Ha sido renuente en asistir, simplemente se ha dedicado a poner mensajes en su cuenta de X, antes Twitter, para señalar que está siendo perseguida por la fiscalía de Francisco Barbosa, pero las pruebas en su contra son muy graves.
El proceso es de absoluta gravedad, pero ha tenido tintes políticos por el enfrentamiento de Monsalve con el fiscal Barbosa, que ahora se atizó con el nombramiento como abogado de Miguel Ángel del Río, quien le dijo a SEMANA que el proceso contra la funcionaria hace parte de una persecución del ente acusador y, por tal razón, la defenderá.
El proceso
“La exigencia era de 600 millones de pesos, 100 para el señor Jimmy Forero y 500 para la fiscal”, fue la revelación que hizo a la Fiscalía, en marzo de este año, Martín Ricardo Manjarrés, un empresario del sector de los vehículos blindados que, en una denuncia de cuatro páginas, resumió graves hechos de corrupción con los nombres de un abogado, varios investigadores y la fiscal Angélica Monsalve.
El expediente incluyó audios, correos, declaraciones, informes de campo, interceptaciones y decenas de documentos, todos conocidos por SEMANA, que dibujan en un confuso escenario de ofrecimientos judiciales millones de pesos en efectivo y acuerdos con la Fiscalía, a cambio de declaraciones falsas. La oferta incluía principios de oportunidad.
“La señora fiscal Angélica Monsalve insiste en que si no acepto el principio de oportunidad, me va a meter a la cárcel”, dijo Yonn García, otro testigo que el pasado 10 de marzo, en una extensa declaración, les contó a los fiscales contra la corrupción de qué manera firmó, por petición de un grupo de investigadores, un interrogatorio que ya tenía las respuestas redactadas, con graves señalamientos en contra de generales de la policía, funcionarios de la Unidad Nacional de Protección (UNP) y altos directivos de la misma Fiscalía.
Un abogado, que en la denuncia y en la decena de declaraciones en poder de SEMANA fue identificado como Yimmy Forero, les advirtió que serían capturados en el marco de la investigación que estaba en poder de una “amiga suya”. El abogado, según la denuncia, advirtió que tenía comunicación directa con la fiscal y que podría evitar la judicialización.
“Que se requería un compromiso de pago, que la fiscal tenía la posibilidad de notificar el archivo del proceso o la solicitud de servicios judiciales para la audiencia de imputación de cargos”, señaló Manjarrés, quien a través de correos electrónicos advirtió cómo el abogado Forero le exigió un pago de 500 millones de pesos para librarse del proceso que cursaba en el despacho de la fiscal Monsalve.
Para tomar la decisión de juzgarla como reo ausente, la Fiscalía explicó al juez que en diferentes oportunidades solicitaron al centro de servicio judiciales fijar una audiencia de imputación de cargos y en las mismas instancias se aplazaron con distintos motivos de aplazamientos. Adicionalmente, el fiscal del caso señaló que la funcionaria ni siquiera asistió a los interrogatorios que convocó el ente acusador.