La Misión de Observación Electoral (MOE) alertó sobre un aumento de violencia en varios municipios del país ad portas de las elecciones legislativas y presidenciales. En la misiva afirmaron que en 131 municipios de Colombia se estarían concentrando los mayores riesgos para los comicios de este año.
Entre tanto, en medio de una entrevista, el coordinador de la MOE en Norte de Santander, Jairo Oviedo, afirmó que este departamento estaba viviendo un auge en los hechos violentos focalizados en zonas del Catatumbo y en el casco urbano de Cúcuta, lo que estaría amenazando el desarrollo de las campañas y procesos de elección.
“Tenemos una inquietud frente a nuestra región, la manera como ha arreciado la violencia, especialmente en la zona del Catatumbo y área metropolitana de Cúcuta... Nos preocupa que cada día se registran acciones violentas contra la Fuerza Pública, oleoductos y vías en la zona del Catatumbo, y en Cúcuta la distribución de panfletos amenazantes”, afirmó Oviedo, para RCN Radio, resaltando que los continuos ataques, tanto a la población civil como a la infraestructura pública estaría aumentado con respecto a los registros de períodos de elecciones de años anteriores.
En el documento de la MOE, se indicó que en Norte de Santander, otros de los municipios que estaban presentado riesgos por actores armados en medio de estos comicios eran Convención, El Carmen, El Tarra, Hacarí, Teorama y Tibú. Sin embargo, también se agregó que esta situación estaría afectando a otras regiones del país.
“Los riesgos electorales se concentran en 23 de los 32 departamentos, de manera particular en las siguientes cinco subregiones: el Catatumbo, el sur de Bolívar y el nordeste antioqueño, el bajo Putumayo, la Orinoquia y la Amazonia, y el Andén Pacífico. Se destaca el departamento de Arauca, donde casi la totalidad de los municipios se encuentran en riesgo extremo”, explican en la misiva.
En total, la MOE informó que para este año se han detectado riesgos en unos 319 municipios, lo que corresponde a nueve territorios más que en los estudios realizados para las elecciones de 2018, y se recalcó que, desde 2010, el país había venido presentando disminuciones en los registros de zonas en riesgo electoral. Sin embargo, ante el aumento de la violencia para estos últimos dos años, los indicadores comenzaron a subir.
“Un ejemplo de esto es la situación en el departamento de Arauca, en donde la crisis humanitaria es de proporciones mayúsculas, pues cinco de sus siete municipios se encuentran en riesgo extremo y dos en nivel alto, a saber: Puerto Rondón y Cravo Norte”, aseguraron en el documento publicado este miércoles, y agregaron “la presencia del Frente 10 de las disidencias de las FARC, así como la del ELN, y la crudeza de sus acciones terroristas tienen secuestrada en su propio territorio a la población civil”, con respecto a los riesgos que estaría viviendo Arauca, donde todos los municipios están siendo afectados.
Alejandra Barrios Cabrera, actual directora de la MOE a nivel nacional, aseveró en el informe que este tipo de violencias estaría afectando la democracia, ya que a través de los hechos violentos se amedrenta a la comunidad para que tome diferentes tipos de decisiones en las urnas.
“El recrudecimiento de la violencia es una amenaza latente para la democracia colombiana. Un claro ejemplo de ello es la escalada violenta de enero, en la que hubo ataques a delegaciones humanitarias, líderes políticos, sociales y comunales, además de atentados coordinados contra la Fuerza Pública. Estos hechos tienen un efecto sobre el proceso electoral, pues se impide la realización de actos de proselitismo político y se infunde miedo a la ciudadanía a la hora de ejercer su derecho al voto”, acotó Barrios.