Después de la encuesta del Centro Nacional de Consultoría (CNC) para SEMANA, la cual mostró a Rodolfo Hernández pisándole los talones a Federico Gutiérrez, el equipo estratégico de Gustavo Petro organizó una reunión imprevista. Alfonso Prada, jefe de debate, canceló su presencia en el cierre de campaña en Barranquilla para planear segunda vuelta y asesorarse con el español Antoni Gutiérrez-Rubí y demás estrategas de comunicación.
“Toda la tarde se la voy a dedicar a trabajar en la segunda vuelta. Nos vamos a preparar de la manera más profesional posible porque es una eventualidad que existe. (...) Desde la hora cero, vamos a tener una estrategia impecable de comunicación, publicidad y todo”, le dijo Prada a SEMANA el sábado 21 de mayo.
Las redes sociales del petrismo, desde este punto, comenzaron a cambiar el usual elogio hacia el ingeniero por insultos y acusaciones. Trajeron a colación videos sin contexto, comentarios desafortunados e incluso supuestos vínculos con Álvaro Uribe.
“¿Ya no le sirvo, doctor Petro?”, fue la reacción del candidato santandereano al cambio de tono de Petro y sus más cercanos aliados.
La ofensiva también radica en el hecho de que Hernández, para muchos, es el candidato que amenaza de forma directa las posibilidades de Petro. Si se hacen las cuentas, el voto contra el líder del Pacto Histórico se manifestó por medio de Federico Gutiérrez, logrando un poco más de 5 millones de votos. Muchos dicen que la transferencia hacia el electorado del ingeniero es directa, mientras el ganador del domingo parece haber llegado a su techo.
A su vez, el discurso de la victoria del 29 de mayo es la prueba de que las próximas tres semanas estarán llenas de ofensivas y estrategias.
Gustavo Petro, por su parte, no dejó de mencionar a Hernández en todo su pronunciamiento. No solo su fondo, sino su forma: citó frases relacionadas con Tik Tok y las demás redes sociales.
“La corrupción no se combate con frases de Tik Tok, así algunas personas muy respetables piensen que sí. La corrupción se combate arriesgando la vida, porque es un régimen de corrupción lo que enfrentamos”, dijo Petro desde el Hotel Tequendama, lugar desde donde les habló a quienes lo apoyaron en la contienda.
Mencionó también el proceso que se adelanta en contra de Rodolfo Hernández, por presuntas irregularidades en contratación y también su rol como empresario de la construcción en varios municipios de Santander.
“Quién puede considerar que el cambio real consiste en tener centenares de miles de familias esclavizadas pagando créditos hipotecarios, porque a los dueños de esos apartamentos y casas les parece delicioso que los hombrecitos y las mujercitas paguen 15 años al propietario multimillonario para poder tener una casa”, dijo, en contra de quien fue una de sus opciones para asumir el rol de vicepresidente.
Efectivamente, las próximas tres semanas estarán llenas de cuestionamientos del petrismo hacia Rodolfo Hernández. Por ahora, se vienen viralizando los videos en los que sale mal parado. Especialmente, aquel en el que dice admirar a Adolf Hitler, dictador alemán responsable del holocausto judío.
También aquellos en los que habla de la prostitución de forma despectiva, entre otras muestras de presunto machismo.
Sus vínculos con el uribismo y el supuesto apoyo de Álvaro Uribe en su carrera por la Alcaldía de Bucaramanga están siendo difundidos en redes. También videos de aquellos miembros del Centro Democrático que ya volcaron el apoyo hacia el ingeniero.
Mientras tanto, Gustavo Petro, desde su discurso de victoria, intenta proyectarse como el camino seguro, predecible y respetuoso del establecimiento.
“Hay cambios que son al vacío, hay cambios que no son cambios, son suicidios. Nosotros queremos invitar a toda la sociedad colombiana a hacer un cambio de verdad, un cambio hacia adelante, un cambio constructivo, un cambio que nos permita una nueva era mucho más próspera, de mucho más bienestar, de mucha más capacidad tanto para el pueblo como para la Nación colombiana”, dijo Petro.