¿Cómo ha cambiado la dinámica de la confrontación armada entre las Farc y la Fuerza Pública durante el 2010? Esa es una de las preguntas que la Corporación Nuevo Arco Iris intenta resolver con el Informe seguridad y conflicto armado 2010, “balance de las Farc después de 'Jojoy'”, publicado en la mañana de este miércoles.En el capítulo titulado De la guerra de ‘Jojoy’ a la guerra de ‘Cano’, el documento señala que si bien la muerte de Víctor Julio Suárez fue el punto final del debilitamiento del Bloque Oriental, se fortaleció el Comando Conjunto de Occidente, que tiene presencia en los departamentos de Nariño, Cauca y Valle del Cauca. Esta estructura, al mando de Guillermo León Sáenz, alias ‘Alfonso Cano’, y Jorge Torres Victoria, alias ‘Pablo Catatumbo’, adoptó una nueva estrategia de atomización y utilización de armas artesanales. Acciones en Cauca, Nariño, Valle, Caquetá, norte del Huila y sur del Tolima muestran una importante actividad militar del grupo guerrillero, que ha llevado a que cerca de 1.800 militares queden fuera de combate.“Es notorio como, durante el año 2010, de los cerca de 400 campos minados activados cerca de 80 fueron en vías de comunicación, muchos de ellos activados al paso de contingentes militares. Es decir más que minas de carácter defensivo son ofensivas”, dice el informe. Las Farc han cambiado su estrategia a la acción de pequeños grupos, evitan la construcción de grandes campamentos y la concentración de tropas. Ese reacomodamiento, sin embargo, no significa mayor fortaleza, pero sí demuestra una capacidad de adaptación de la guerrilla a las nuevas condiciones de combate. Según el informe, esa adaptación obliga a las Fuerzas Militares a cambiar de estrategia, que para el ataque al Bloque Oriental, al mando del ‘Mono Jojoy’, dieron un gran salto en movilidad aérea, en inteligencia y en construcción de redes de cooperantes entre la población. Y es que las bajas de la Fuerza Pública, entre muertos y heridos, en el año 2010, ascienden casi hasta 2.500. La cifra ya supera a la que se registró en 2002 cuando se presentaron 2.236 y a 2009, año en el que se registraron 2.320 bajas, indica el informe basado en fuentes judiciales. En lo que va de 2010 un total de 69 estructuras de las Farc presentaron acciones armadas, 184 municipios registraron acciones militares de esta guerrilla. Nuevo escenario del conflicto: la cordillera central Al debilitamiento del Bloque Oriental, que tuvo su detonante con la caída del ‘Mono Jojoy’, se contrapone el fortalecimiento del Comando Conjunto de Occidente que opera en los departamentos de Valle del Cauca, Cauca, Nariño y sur del Chocó, junto al Comando Conjunto Central en el Sur del Tolima, Norte del Huila y Oriente tolimense. El informe de la Corporación Nuevo Arco Iris señala que el fortalecimiento coincide con el protagonismo que adquirieron ‘Alfonso Cano’ y ‘Pablo Catatumbo’, y con una nueva etapa de las Farc, caracterizada por la estrategia de movilización de pequeños contingentes de tropa. El terror de las minas antipersonales La utilización de campos minados y minas antipersonal se mantuvo constante con respecto al año 2009. Sin embargo, se ha convertido en el segundo tipo de acción militar implementada por el grupo guerrillero. Además, ha cambiado el modus operandi tradicional en la instalación de las minas. En el sur del Tolima, Guaviare, Meta y Sur de Bolívar, por ejemplo, han dejado de sembrar minas y las han puesto en las ramas de los árboles a una altura de dos o tres metros. Al paso de las personas se activan causando daños en el rostro o provocando la pérdida de la visión, entre otros daños. “Es de tal magnitud que el Ejército nacional se ha visto obligado a crear seis grupos Marte Divisorio, un Batallón de desminado y un pabellón adicional en el hospital militar para la atención de los miembros de la fuerza pública caídos en minas. En la actualidad el Batallón de Desminado se encuentra realizando operaciones en los departamentos de Antioquia, Caldas, Meta y Bolívar. Por su parte, los grupos Marte realizan tareas en Nariño, Caquetá y otros municipios del país”, se lee en el documento. Aumentaron los hostigamientos Otra particularidad que, según Nuevo Arco Iris, se ha presentado durante este año es el aumento de los hostigamientos. Nada más en los primeros diez meses de 2010 se registraron 341, de los cuales más de 70 se dieron contra estaciones policiales ubicadas en cabeceras municipales y otras 58 contra patrullas policiales en movimiento. En lo que va del año, en 42 ocasiones han sido hostigados municipios del Norte del Cauca. Aumentaron los combates El informe señala que en 2010 se ha producido un alto número de combates: más de 400. “Un combate, entendido como una acción militar de choque entre dos estructuras enemigas por más de 120 minutos, mostraría que las Farc aún mantienen una fuerte capacidad bélica en varias regiones del país”, argumenta el documento. La investigación advierte que si bien “las Fuerzas Militares están dedicando una parte importante de sus esfuerzos de inteligencia y movilidad aérea a ubicar y golpear a los miembros del Secretariado y del Estado Mayor Central (...) los resultados aún no son definitivos y cabe la posibilidad de que las Farc tengan un nuevo aire en los años venideros”.