Álvaro Córdoba, hermano de la congresista Piedad Córdoba, a través de su defensa, acaba de radicar el recurso de reposición con el que busca tumbar la extradición aprobada por el Gobierno Petro hacia Estados Unidos. Córdoba es señalado de narcotráfico.
Según la abogada de Córdoba, se pide lo que se conoce como nulidad del trámite administrativo. Es decir, que se anule el proceso de extradición porque, aseguran: “La Resolución del Gobierno nacional que ordena el traslado de Córdoba, la que concede la extradición, no fue motivada en punto de la conveniencia”.
Argumentan que los elementos del trámite y la manera como se ha dado el proceso “no garantizan ni aseguran el respeto de los derechos fundamentales de nuestros ciudadanos”, aplicable a Córdoba.
También explica la defensa que, por ejemplo, el artículo 35 de la Constitución Política, no incluye el mecanismo de extradición como alternativa para justificar la entrega de los connacionales.
Una de las peticiones que la defensa le había hecho a Gustavo Petro era que revisara la aplicabilidad del tratado de extradición entre Colombia y Estados Unidos, y evaluara el principio de legalidad.
Sin embargo, en la resolución donde el presidente decidió sobre Álvaro Córdoba, respondió que no le corresponde referirse a ese tema. Al fin y al cabo, él tiene la facultad de decidir y no explicar sus razones, porque ya tiene el visto bueno de la Corte Suprema.
Esta revista estableció que tan pronto Álvaro Córdoba conoció la decisión presidencial, presentó un bajonazo de ánimo, está achantando, habla poco y cuando lo hace insiste en su inocencia, pese a que la DEA delegó a un agente encubierto que se hizo pasar como narco y logró adjuntar gran parte de las pruebas en su contra.
A través de mensajes de texto, llamadas, audios y demás, el encubierto puso en evidencia cómo Córdoba hacía parte de una red que negociaba y traficaba droga y armas hacia Venezuela, México y Estados Unidos, con el respaldo de Gentil Duarte, excomandante de las disidencias de las Farc, fallecido en Venezuela.
Según el expediente que lleva la justicia norteamericana, Córdoba asistía a las reuniones con disidencias de las Farc en varias regiones del país y él, al parecer, concretaba la salida de mercancía desde Tumaco, Nariño, Valle del Cauca y Cauca.
Lida Esneda Ruiz, la madre de Piedad y Álvaro Córdoba ha sido la más impactada con la noticia, porque no sabía que su hijo estaba preso, y se enteró por los canales de televisión que sería extraditado a Estados Unidos. Mientras, Piedad Córdoba enfrenta quebrantos de salud en Medellín y no ha podido encontrarse con su hermano, pese a que dialogan constantemente.
Córdoba, pese a su oscuro pronóstico, es optimista y confía en que después del recurso de reposición, Gustavo Petro reverse su decisión. Por esto, la senadora Piedad Córdoba ―quien al comienzo asumió la defensa de su hermano porque es abogada― no ha proferido palabra alguna frente al tema.
Recordemos que en un video divulgado por SEMANA, él, desde una bicicleta estática, se muestra confiado en que no será extraditado en el gobierno de Gustavo Petro.