En la tarde de este sábado, 7 de septiembre, la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios (USPEC), se pronunció sobre el informe publicado por SEMANA, en su edición 2202, relacionado con la atención de salud, alimentación e infraestructura brindada a los privados de la libertad en la penitenciaría de media seguridad en Puerto Triunfo, Antioquia.
El informe, en el que se revela que más de 1.546 reclusos viven en condiciones infrahumanas y consumen agua infestada de gusanos y alimentos podridos; además, que han muerto 16 personas, la mayoría por tuberculosis y bacterias, fue enfrentado por la USPEC en un comunicado de tres páginas.
Según el comunicado, la entidad desvirtúa las denuncias hechas por los mismos reclusos en cuanto al servicio de alimentación, estado nutricional de la población privada de la libertad, servicios de salud y la infraestructura y mantenimiento.
Frente a la alimentación, los privados de la libertad denunciaron el mal estado de los alimentos y el agua que consumen en el penal, la cual señalaron que era turbia y estaba infestada de gusanos pequeñitos, pegados unos con otros. Sin embargo, la USPEC señaló que desde agosto se le viene haciendo seguimiento a las condiciones del servicio de alimentación.
“En la última visita efectuada el día 22 de agosto del 2024, se verificaron las condiciones adecuadas en el servicio; lo confirman los registros fotográficos e informes oficiales, los cuales desvirtúan la información que está siendo entregada a los medios de comunicación, dado que, si bien es cierto, se han evidenciado hallazgos que hacen parte de los planes de mejoramiento, la alimentación entregada cumple con las condiciones higiénico - sanitarias y nutricionales, objeto de seguimiento de los contratos de alimentación”, manifestó la entidad.
Frente a la calidad del agua, la entidad resaltó: “Confirmamos que la Interventoría Interalimentos 2024 y el laboratorio Biotrends realizaron tomas de muestras de acuerdo con la normatividad vigente, evidenciando que la misma cumple con los parámetros requeridos. Así mismo en las muestras microbiológicas realizadas a los alimentos, se confirma que las mismas cumplen con los parámetros de calidad e inocuidad”.
Frente al tema nutricional, la USPEC señaló que según el tamizaje realizado por el contratista al inicio del contrato, que corresponde al 31 % de la PPL del establecimiento, “el 66,3 % de los PPL se encuentran en adecuado estado nutricional, del restante, el 22,53 % en malnutrición por exceso y el 11,17 % de malnutrición por déficit”.
Inclusive, aseguraron en el comunicado que “las personas que se encuentran en déficit de peso, tienen asociadas otras patologías, tales como la tuberculosis o la dependencia a sustancias psicoactivas, lo cual influye directamente en su gasto calórico”, y concluyó que “la malnutrición por exceso se relaciona con la poca actividad física prevalente en la población y el consumo excesivo de alimentos fuentes de carbohidratos principalmente”.
Con respecto al servicio de salud, la entidad indicó que se hace un seguimiento periódico para garantizar las acciones necesarias para la mitigación de enfermedades de salud pública a través de “mesas de trabajo y visitas a la cárcel, para la verificación y fortalecimiento de la prestación de los servicios”.
Allí resaltan que se hace un fortalecimiento por parte del talento humano de las actividades de búsqueda activa para los diferentes eventos como tuberculosis, varicela, entre otros, así como detección temprana de los casos y articulación con la Secretaría de Salud del municipio, para dar inicio a los tratamientos y seguimiento a los casos.
Sobre la infraestructura y el mantenimiento penitenciario y carcelario, la Unidad manifestó que se han venido adelantando acciones relacionadas con mejoras en la Planta de Tratamiento de Agua Potable (Contrato No. 242 de 2023), realizadas entre los meses de septiembre y noviembre de 2023.
También limpieza “en los tanques donde se almacena el agua tratada y se reemplazaron algunas tuberías para evitar daños y garantizar el correcto flujo del líquido. Estos trabajos han permitido mejorar la distribución y calidad del agua que consumen los PPL”.
Se dio solución al problema eléctrico en la planta de tratamiento, se realizó mantenimiento de la planta y suministro de agua; así como, en agosto de 2024, mantenimiento en los filtros y la instalación de materiales nuevos, lo cual mejoró la calidad del agua tratada, evitando interrupciones durante el servicio.
La entidad finalizó el comunicado diciendo: “Desde la USPEC, reiteramos el compromiso de continuar haciendo un seguimiento riguroso a la prestación de todos los servicios que hacen parte de nuestra misionalidad, reafirmando siempre los estándares de calidad para dignificar y humanizar el sistema penitenciario y carcelario, dando siempre garantía de los derechos de la población privada de la libertad del país”.
Denuncia de los reclusos
El Inpec sabe lo que está pasando y reconoce que en El Pesebre los reclusos viven un verdadero infierno. SEMANA conoció perturbadores relatos de los reclusos que muestran la barbarie a la que están sometidos.
El relato da escalofrío. Uno de ellos asegura que cada vez que abre la llave, si hay agua, esta sale turbia e infestada de gusanos pequeñitos, pegados unos con otros. También resaltan que la comida les llega podrida, por lo que a veces hasta se niegan a consumirla, pero finalmente el hambre los doblega.
Las impactantes fotografías compartidas por los presos muestran las carnes llenas de gusanos, papas y frutas podridas, y bebidas oscuras con residuos de piedras. Muchos relataron, en medio de las lágrimas, que en primera instancia se niegan a comer y beber esos alimentos, pero vencidos por la sed y el hambre no hay un camino diferente que acceder a esa comida en mal estado.
Otro de los presos señaló que cuando reclaman por comida justa les contestan que son “escorias de la humanidad”. “La llaman la cárcel de la muerte porque han muerto más de 15 PPL (personas privadas de la libertad) en los últimos dos años por desnutrición, enfermedades raras y tuberculosis. Dicen que los internos no son nada, solo escoria de la humanidad”.
SEMANA revisó las cifras oficiales del Inpec y, efectivamente, entre 2023 y 2024 fallecieron 16 internos. Sus nombres e historias, simplemente, forman parte de un dosier de la barbarie. El Inpec también precisó que, si se calcula la población carcelaria frente a la cantidad de los fallecidos, esta es la cárcel donde hay más muertos en Colombia.
Frente a la prestación del servicio de salud, el Inpec reconoció que hay graves problemas en la prestación de salud por parte del operador seleccionado por la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios (Uspec). En los reportes de agosto, la institución indicó que durante 21 días no hubo un solo medicamento en las estanterías de sanidad, y un profesional se encargó de velar por la integridad de los 1.546 internos en turnos de 24 horas.
Conozca todas las denuncias de la población privada de la libertad en el siguiente artículo:
Internos le responden a la USPEC
Tras conocer el comunicado de la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios (USPEC), los internos del Centro Penitenciario de Mediana Seguridad de Puerto Triunfo, Antioquia, emitieron un comunicado en el que denuncian la grave violación a los derechos humanos y la falta de alimentación adecuada.
“Este comunicado (https://www.facebook.com/share/p/yBLfkYP9xf3AP449/?mibextid=oFDknk ), de USPEC sobre la supuesta calidad del alimento es una vil mentira. La realidad es que la alimentación es pésima, todo está pasado y en mal estado”, señalaron en el comunicado los internos.
“Cuando llegan los entes investigadores, el centro penitenciario esconde toda la evidencia. Hoy, 7 de septiembre de 2024, recibimos alimentación en mal estado. Denunciamos esta situación ante las autoridades competentes y la opinión pública, con base en los decretos internacionales y nacionales que protegen nuestros derechos”, indicaron.
Así mismo, exigieron que se tomen medidas inmediatas entorno a “Garantizar la alimentación adecuada y suficiente para los internos, investigar y sancionar a los responsables de la falta de alimentación e implementar medidas para prevenir futuras violaciones de los derechos humanos”.