La alemana Rebecca Sprößer fue detenida el pasado martes 27 de julio y expulsada del país el 29 de julio. Según Migración Colombia, “cerca de las 8:00 de la noche (del miércoles), esta ciudadana alemana fue expulsada de territorio nacional tras las respectivas verificaciones. La ciudadana fue objeto de verificación en Cali. Pese a su condición de turista, desempeñaba actividades que no correspondían al turismo y dada esa situación se inició el trámite y se toma la decisión de expulsión”, confirmó en su momento Juan Espinosa, director de Migración Colombia.

El hecho se dio luego de que la mujer cobrara protagonismo por aparecer en fotos junto a miembros de la llamada primera línea en la ciudad de Cali, durante las largas y violentas protestas que se tomaron las calles de esa ciudad durante algunos días de abril y todo el mes de mayo.

La entidad señaló que “la decisión (de expulsarla de Colombia) se tomó como una forma de respeto a las normas migratorias. Esta mujer de 34 años tenía un permiso de turismo, pero sus actividades no fueron asociadas con esto, hubo un grado de exposición alto y se puso en riesgo”, aseguró Espinosa en una entrevista con Vicky en SEMANA.

No obstante, según estableció el diario El Tiempo, Sprößer podría ser requerida por las autoridades para establecer cómo terminó en medio de un hecho de violencia que acabó con la vida de Jhoan Sebastián Bonilla Bermúdez. Desde Cali se confirmó el fallecimiento del amigo de la mujer tras haber recibido varios impactos de bala la semana pasada cuando se encontraba con ella en un establecimiento ubicado en el barrio Las Ceibas, de la capital de Valle del Cauca.

El hombre murió el miércoles en un centro asistencial de la capital del Valle del Cauca, hasta donde fue remitido por la gravedad de sus heridas.

Los hechos fueron denunciados la semana pasada por Sprößer, quien en una publicación de Facebook reveló públicamente el hecho.

“Estábamos sentados afuera, en un lugar público, y de pronto, sin hablar, vino un sujeto y nos disparó a corta distancia. No dejó de disparar hasta que su arma se quedó sin tiros. Mi amigo estuvo frente a mí y así me salvó la vida. Él recibió 13 impactos de bala en todo el cuerpo, tres de ellos en la cabeza y varios en el pecho”, relató la mujer.

Según el informe de la Fiscalía, revelado por ese medio, el sicario huyó a bordo de una motocicleta color negro, y al parecer la víctima se encontraba en compañía de su pareja sentimental. Un nexo que supuestamente habría sido confirmado por allegados. No obstante, los investigadores habrían encontrado contradicciones en la versión de Sprößer, por lo que el ente acusador indagará más sobre los motivos del homicidio de Bonilla Bermúdez.

Ante el señalamiento, la alemana negó cualquier relación sentimental y afirmó que lo tuvieron “fue un amor por la causa, un amor platónico que compartimos por luchar”. Según El Tiempo, autoridades buscan aclarar esta interrogante, pues debido al número de impactos que recibió Bonilla, se podría afirmar una “venganza sentimental”, como se lee en la hipótesis del reporte policial.

Tras la denuncia del asesinato, la Policía de Cali se pronunció y señaló que, según las primeras indagaciones basadas en testimonios de quienes presenciaron los hechos, el joven de 26 años fue víctima de un intento de hurto cometido por desconocidos que portaban al parecer un arma traumática modificada, tras lo cual resultó lesionado por varios impactos de la misma.

Entre la información entregada por las autoridades el pasado sábado 24 de junio, “este joven que terminó lesionado cuenta con dos anotaciones, una por estafa y otra por hurto calificado, las cuales están siendo investigadas”.

Sobre los hechos, la mujer afirmó al final de su relato que el ataque no fue un robo sino que fue “atentado con el objetivo de matar”.

“No podemos decir quién fue, pero estamos en todo el proceso con los DD. HH. Solamente quedó muy claro que esto no fue ningún robo, esto fue un atentado con el objetivo de matar”, sostuvo.

Sobre la noticia del fallecimiento, la alemana dijo: “El 28 de julio a las 07:40 pm murió una parte de mí. A las 7:40 de la noche tuve que embarcar el vuelo a Alemania y en el momento cuando entré el avión falleció mi ángel de la guardia JHOAN SEBASTIÁN BONILLA BERMÚDEZ y quiero que todo el mundo sepa su nombre!”.