Tal como SEMANA había anticipado, el Consejo de Estado rechazó por improcedente la tutela presentada en contra de la polémica canción ‘Perra’, de J Balvin. Para el alto tribunal, este tipo de acciones judiciales no pueden ser utilizadas para promover la censura, en este caso, una expresión cultural como lo es la canción y el video del tema musical.
Con ponencia de magistrado Jaime Enrique Rodríguez Navas, la Sección Tercera del Consejo de Estado rechazó las pretensiones de Leonardo Santo Petro Llorente, quien pedía que la canción dejara de ser comercializada. Además, que el cantante colombiano presentara excusas públicas por la letra y el respectivo video (el cual fue retirado de YouTube en octubre de 2021).
El Consejo de Estado acaba de publicar el fallo en el que declaró improcedente una demanda que, en ejercicio de la acción de tutela, presentó un ciudadano con el fin de que se ampararan los derechos fundamentales a la igualdad, a la no discriminación, al buen nombre, a la dignidad y a la honra de las comunidades negras, afrodescendientes, afrocolombianas y de las mujeres con ocasión del trabajo discográfico y audiovisual denominado ‘Perra’ que presentó el cantante José Álvaro Osorio Balvin, conocido en el mundo del espectáculo como J Balvin.
El demandante pretendía que “se ordenara al artista ofrecer excusas públicas a las mujeres y las comunidades negras de Colombia, al considerar que la canción contenía términos racistas, sexistas, machistas y misóginos, provocando tratos discriminatorios contra los dos grupos”.
Además, el tutelante buscaba que “se ordenara a varias entidades del Gobierno y dependencias del Congreso adelantar acciones para reparar las afectaciones y sancionar las conductas que provocaron la supuesta violación a las garantías constitucionales invocadas”. Para él, algunas de estas entidades “omitieron el cumplimiento de sus deberes, al no revisar el contenido de la pieza musical, no evitar su reproducción en redes sociales y no tomar medidas correctivas para preservar la integridad étnica, probablemente afectada por la canción”.
El Consejo de Estado declaró improcedente la demanda, al concluir que el accionante no demostró tener legitimidad en la causa. A su juicio, no hay elementos de que permitan reconocer al demandante como miembro de la comunidad negra, con la que comparta manifestaciones culturales. Tampoco manifestó o probó ser representante de un consejo mayor ni declaró ser o considerarse mujer.
Además, el tutelante tampoco acreditó que todos los integrantes de estos grupos raizales y las mujeres estuvieran impedidos de acudir en forma directa a instancias de la justicia para invocar ellos mismos la defensa de sus derechos.