Hace unos meses Antanas Mockus se quedó sin su curul en el Congreso. Aunque fue el segundo senador más votado (536.000 votos), una demanda por supuesta violación al régimen de inhabilidades prevista en el artículo 179.3 de la Constitución Política lo sacó de su cargo. El argumento era que Mockus era representante legal de Corpovisionarios cuando esta entidad firmó un contrato con la Gobernación de Cundinamarca faltando menos de 6 meses para las elecciones al Congreso. La ley exige que quienes se presenten a estos cargos no celebren contratos con el Estado 6 meses antes de su elección, como habría sucedido en este caso. Corpovisionarios obtuvo 400 millones de pesos para apoyar y diseñar proyectos de cultura ciudadana cuando ya faltaban menos de 6 meses para las elecciones al Congreso. En su momento la defensa de Mockus explicó que el material probatorio en su contra era malinterpretado: “Aún cuando Antanas Mockus aparecía formalmente como representante legal de Corpovisionarios, y esa persona jurídica celebró contratos con entidades públicas dentro de los 6 meses anteriores a la elección, lo cierto es que él no intervino en gestión de negocios ante entidades públicas ni celebró contratos en interés propio o de terceros”, dice la tutela que puso Mockus para recuperar su curul. La defensa, encabezada por Humberto de la Calle, agregó que el líder de la Alianza Verde delegó sus funciones en otra persona y en consecuencia no era el verdadero representante legal de la corporación.
Después de dar una batalla jurídica, la Sala Plena de lo Contencioso Administrativo del Consejo de Estado, en segunda instancia, confirmó el martes pasado la decisión de negar la solicitud de pérdida de investidura del congresista. El alto tribunal estudió los elementos y le dio la razón a Mockus: “encontró que Mockus no incurrió en ninguna de las conductas que podían haberlo inhabilitado para ser elegido senador”, pues “no gestionó negocios ante entidades públicas ni celebró contratos con ellas en interés propio o de terceros, en los seis meses anteriores a su elección”. “La sala concluyó que no se configuró el elemento objetivo de la causal alegada, pues no se acreditó que hubiera participado de manera activa, real, trascendente y útil en la gestión y celebración de los negocios jurídicos cuestionados”, sino que por el contrario, fue acreditada otra persona, quien “ejerció de manera activa y determinante las diligencias de acercamiento con las entidades públicas contratantes y que cerró esa etapa de tratativas comerciales con la suscripción de los convenios a nombre de Corpovisionarios”, se lee en el fallo, aprobado con 12 votos a favor y 7 en contra. La acción de nulidad había sido presentada por el abogado guajiro José Manuel Abuchaibe Escolar, quien alegó que Mockus se inscribió a candidato estando inhabilitado. Abuchaibe recurrió a todas las instancias para demostrar que el congresista verde estaba inhabilitado y que estaba ocupando un puesto en el Congreso que según él podría ser para “otros candidatos que sí cumplen con los requisitos de ley”.
Cuando le retiraron la curul a Mockus, este la aceptó prometiendo luchar por mantener su curul haciendo respetar los votos de sus electores: “Por respeto con la ciudadanía, que depositó su confianza en mí, agotaré todas las instancias jurídicas para defender el derecho a elegir de cientos de miles de ciudadanos”, dijo Mockus en un comunicado. Ahora que cumplió su promesa de regresar al Congreso se tardará un poco más en llegar al parlamento por motivos de salud. Hace pocos días sufrió una hernia discal lumbar y tendrá incapacidad médica por al menos un mes. Esta no es solo una mala noticia para los votantes de Mockus que lo quieren ver ya en el capitolio, sino para la candidata a la Alcaldía de Bogotá, Claudia López, a quien no podrá acompañar en la recta final de esta contienda electotal que cada vez está más apretada.