Como estrellas de cine llegaron el pasado viernes al municipio de Policarpa (Nariño) cuatro disidentes de las Farc para realizar un evento de tipo político en la región. No importó que uno de los pasajeros tuviera un proceso penal por la sangrienta emboscada que se registró a finales de diciembre de 2022 a un grupo de militares que se encontraban en la vía al municipio de Policarpa (Nariño). En la acción fueron asesinados seis soldados, mientras que ocho resultaron heridos.
Por información que permitiera la captura de alias Marlon, el jefe del Comando Coordinador de Occidente, las disidencias en el Cauca, las autoridades ofrecían una recompensa de 100 millones de pesos. Sin embargo, se habla en pasado, porque en las semanas recientes el Gobierno le pidió a la Fiscalía General suspender la orden de captura que pesaba en su contra para convertirlo gestor de paz y así ayudar al ambicioso proyecto impulsado por el Gobierno.
El vuelo del helicóptero de matrícula HK-5348 que transportó a Marlon junto a Andrés Patiño y Esteban González fue avalado por la Oficina del Comisionado de Paz con la empresa firma Helistar S.A.S, todo esto bajo el conocimiento del Departamento Administrativo de la Presidencia que echó mano del llamado Fondo de Paz. Según los datos recolectados por el diario El Colombiano, el 21 de marzo se firmó un contrato por 2.800 millones de pesos, el cual tenía una vigencia hasta el 31 de diciembre o hasta que se agotara el monto del mismo.
En videos grabados y publicados por una especie de oficina de prensa de las Farc quedó registrado el encuentro que adelantaron los disidentes en una escuela en Policarpa. No importó la presencia de niños y niñas en el lugar y el hecho que los disidentes estuvieran totalmente armados y con símbolos alusivos a este grupo subversivo.
“En la paz con justicia social, sí, una y mil veces, aunque pretenden arrebatárnosla. Estén atentos y atentas, las Farc EP esperamos iniciar un camino de diálogo y concertación con el Gobierno nacional en el que también tendrán asiento ustedes como protagonistas principales. Si hay que acabar la guerra en Colombia, es la guerra del Estado colombiano contra el pueblo”, se le escucha decir a alias Marlon Vásquez.
Cuatro días después de la firma del contrato se puso en marcha el polémico vuelo. El helicóptero salió desde Bogotá rumbo a Popayán. La bitácora indicó que a la 1:%7 de la tarde, con los tres jefes de las disidencias ya montados, se trasladó hasta el Eje Cafetero -sin embargo, no se ubicó el lugar específico-. La reserva estaría relacionada con el hecho que los disidentes se trasladaron hasta los Llanos del Yarí, en el departamento del Meta, donde se encontraría Néstor Gregorio Vera Fernández, alias Iván Mordisco, comandante de las disidencias.
Los contactos de la firma
En documentos consultados por el diario El Colombiano se encontró que la empresa Helistar S.A.S. ha firmado varios contratos con el Gobierno de Gustavo Petro para el uso de aeronaves y pistas de aterrizaje en viajes oficiales. La mayoría de los viajes tienen relación con la Oficina del Alto Comisionado de Paz para realizar traslados bajo la más absoluta reserva y confidencialidad de personas relacionadas con la ‘paz total’.
Pese a que Marlon también es buscado, según inteligencia, las fuerzas militares, por crímenes contra miembros de la extinta guerrilla de las Farc, que se han cometido en Cauca, Nariño y Antioquia, este puede moverse a sus anchas como gestor de paz con este grupo armado ilegal.
Su designación generó gran molestia, puesto que es considerado uno de los disidentes más violentos.