El oso de anteojos (Tremarctos ornatus) necesidad del compromiso de todos los pobladores para poder seguir existiendo. El llamado que hace la CAR es a proteger esta valiosa especie, de no incurrir en el delito de cazarlo y asegurar su hábitat natural.
Estos osos son habitantes exclusivos de los bosques húmedos andinos y las zonas de páramo. Se alimentan principalmente de plantas, semillas y sí en algunas oportunidades de proteína animal, pues son omnívoros.
Alfred Ballesteros, director de la entidad ha manifestado que, en algunas zonas, la expansión de la frontera agrícola, y el mal manejo de las producciones pecuarias dentro del corredor biológico de este mamífero, han causado un aumento de los eventos de interacción negativa con la comunidad.
Actualmente, los ojos de anteojos se encuentran clasificados como una especie en estado vulnerable de amenaza. La expansión de la frontera ha transformado su hábitat natural, reduciendo la disponibilidad de alimento.
“En nuestra región, la CAR ha identificado que, aunque existe una buena oferta alimenticia para los osos, la fragmentación del bosque es un problema grave, razón por la cual se han instalado cámaras trampa para realizar un constante monitoreo y conocer el estado actual de la especie”, indicó ballesteros.
Los municipios con mayor presencia de osos incluyen La Calera, Guatavita, Sumapaz, Cabrera, Machetá, Suesca, Manta y la zona de los Cerros Orientales. La protección del animal conlleva a la conservación de grandes extensiones de bosques alto andinos, páramos y lagunas, así como la preservación de la flora y fauna propia de estos ecosistemas.
“Queremos invitar a la comunidad a conservar el oso andino, especie de gran valor ecológico como regenerador del bosque, toda vez que es una especie sombrilla, es decir, que ayuda a la supervivencia de otras especies de animales y plantas por ser un dispersor de semillas” aseguró Alfred Ignacio Ballesteros, director de la CAR.
Los expertos den fauna aseguran que la función que tienen los osos de anteojos de derribar arbustos los convierte en dinamizadores de las zonas boscosas, ganándose el título de arquitectos de los bosques.
Por eso recomiendan:
● No acercarse a los osos: en caso de avistar un ejemplar, mantener la distancia. No intentar acercarse, perseguirlo o agredirlo.
● Evitar la fragmentación del hábitat: promover prácticas agrícolas y ganaderas sostenibles que respeten sus corredores biológicos.
● Denunciar actividades ilegales: informar a las autoridades sobre cualquier actividad de caza o agresión en su contra.