Como parte de las investigaciones que adelanta la Fiscalía en contra del exsenador Mario Castaño, de manera paralela, en la unidad de extinción de dominio se logró ubicar, en la ciudad de Manizales, un grupo de bienes que estaría a nombre del exsenador y de terceros, que el excongresista, capturado por hechos de corrupción, usó para dejar a su nombre dichos bienes.
Todas las propiedades están en una zona importante de comercio en Manizales y corresponden a un bien urbano, un establecimiento de comercio y siete vehículos, que estarían avaluadas en más de 12.000 millones de pesos.
“La Fiscalía General de la Nación, como parte de la estrategia investigativa integral para judicializar y afectar el patrimonio de los presuntos responsables de actos de corrupción, ocupó con fines de extinción de dominio nueve bienes que habría adquirido por el excongresista Mario Alberto Castaño Pérez”, señaló la Fiscalía.
De acuerdo con los investigadores el exsenador Mario Castaño adquirió esas propiedades a través de una empresa transportadora para evitar el seguimiento de las autoridades. Sin embargo, desde la unidad de extinción de dominio hicieron la trazabilidad y encontraron que efectivamente el excongresista adquirió los bienes, aparentemente, con los dineros de la corrupción.
Según señalaron desde la Fiscalía, este resultado corresponde a una segunda fase investigativa dirigida a detectar el patrimonio constituido por el exsenador, quien aceptó ante la Corte Suprema de Justicia haber articulado una red ilegal que, presuntamente, direccionó ilícitamente la contratación en varias regiones.
En la primera fase, realizada en junio pasado, fueron ocupados 28 inmuebles urbanos, 7 vehículos, 2 sociedades y 1 establecimiento de comercio, cuyo avalúo ascendió a 13.717 millones de pesos. En esa oportunidad, los procedimientos se realizaron en Pereira (Risaralda), Manizales (Caldas), Quibdó (Chocó), Cartagena (Bolívar) y Medellín (Antioquia).
La caída de Castaño
En la mañana de este miércoles 21 de septiembre, pasó lo que se venía venir, el senador Mario Castaño reconoció su plena responsabilidad en los delitos concierto para delinquir agravado, interés indebido en celebración de contratos, peculado por apropiación, estafa agravada y concusión. Con esta acción el congresista liberal recibirá una rebaja en su sentencia que podría fijarse en 15 años de prisión.
La Sala Especial de Instrucción remitirá ahora el expediente a la Sala Especial de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia con el fin que emita el fallo correspondiente. En la diligencia judicial, que no duró más de dos horas, al senador Castaño se le pusieron de presente los beneficios que implica la aceptación de cargos contemplados en el artículo 40 de la Ley 600 del 2000.
Castaño reconoció su participación en la estructura criminal que, con la complicidad de un grupo de alcaldes, funcionarios y particulares se apropió de multimillonarios recursos de la administración pública provenientes del patrimonio del Estado.
El dirigente político caldense, quien se encuentra actualmente privado de su libertad en la cárcel La Picota de Bogotá, tomó la decisión de someterse a una sentencia anticipada después de sostener un careo con Nova Lorena Cañón, su mano derecha en la organización criminal encargada de obtener millonarios contratos en diferentes ministerios y entidades públicas.
En esa oportunidad, Cañón -quien negociaba un acuerdo con la Fiscalía- le manifestó al senador que tenía toda la evidencia para verificar la forma irregular en que se habían exigido sobornos para negociar los contratos y la obtención de una comisión del 10 % sobre el valor total de los mismos.
Castaño llegó a convertirse en la cabeza de una compleja red dedicada al saqueo del erario; a través de la contratación en Caldas, Cauca, Chocó, Risaralda, Tolima y Valle del Cauca fue puesta al descubierto y puso en serios problemas al senador liberal Mario Castaño, considerado uno de los grandes caciques políticos del Eje Cafetero, y quien se reeligió el pasado 13 de marzo con la nada despreciable suma de 68.351 votos.