Desde que se anunció por el presidente Iván Duque, el golpe "impecable" a un campamento de disidentes de las Farc en Puerto Rico, Caquetá, el personero Herner Carreño se preguntó cuándo el ministro de Defensa, Guillermo Botero, iba a contarles a los colombianos que allí habían muerto niños. En la mañana de este miércoles, luego de que el senador Roy Barreras destapó los pormenores de este operativo, Carreño reclamó ante los medios de comunicación por qué no se atendieron las denuncias previas de reclutamiento que hizo en varios consejos de seguridad y cuáles fueron las razones por las que no se informó que había ocurrido una "masacre de niños". En contexto: 

Las declaraciones de Carreño son sensibles ya que confrontan la versión que se ha entregado desde el Ministerio de Defensa. Los altos mandos militares, con Botero a la cabeza, han asegurado que desconocían que había menores de edad en el campamento. La versión de Carreño apunta a que previo al 29 de agosto (día del bombardeo) alertó que al menos tres niñas habían sido reclutadas por los miembros del grupo armado organizado que terminó siendo blanco del operativo militar. El personero agregó que dada la gravedad de la información que poseía presentó una denuncia formal ante la Dirección de Fiscalías de Caquetá por el reclutamiento de los menores. "De los siete niños que denuncia el senador Roy Barreras en el Congreso, tres niños fueron usados utilizados y reclutados forzosamente en zona rural del municipio de Puerto Rico, en el corregimiento de Lucitania. Posteriormente, fueron asesinados en una operación militar, estos niños estaban retenidos contra su voluntad en calidad de secuestrados, sin armamento en etapa de adoctrinamiento", dijo Carreño.En entrevista con Blu Radio, el defensor aseguró que los menores fueron reclutados la última semana de julio. Lo que significa que estaban recién en una etapa de inserción a las filas. Sus declaraciones llevan a creer que el número de víctimas menores de edad se podría elevar. Puntualmente, mencionó tres nombres de niñas cuyos padres llegaron a la Personería pidiendo apoyo jurídico. "Cuando las familias de estas niñas –que además eran objeto de violencia sexual porque eran obligadas a planificar forzadamente– se acercan a recibir información jurídica, ellos me expresan su temor porque viven en esa zona", indicó Carreño.Le recomendamos: En su momento, Duque calificó de "impecable" y "meticulosa" la operación en la que murieron siete niños Las menores vivían en lsa veredas de La Flor, Pringamoso y Villa Hermosa Alta. Una de ellas –Diana Medina Garzón de 16 años– está incluida en el listado que entregó el senador Barreras durante el debate. Un segundo caso es el de Luz Ángela Pérez Bonilla, de 13 años de edad, cuyos restos fueron enterrados el 11 de septiembre, según aseguró el personero. El nombre de esta menor no está en el listado del Ministerio de Defensa, pero el representante del Ministerio Público en Puerto Rico asegura que sus restos fueron entregados por Medicina Legal a los dolientes como víctima del bombardeo ejecutado por la Fueza Aérea.  Carreño aseguró además que existe otro caso que es el de Luz Mar Jaramillo, de 17 años, cuya identidad no es certera dado que los familiares no sabían exactamente cómo se llamaba. Esta menor vivió un tiempo con su madre y otro con su padre. Según el personero, posterior al bombardeo perdió contacto con estas familias.El personero se refirió únicamente a estos tres casos, los cuales tiene documentados y aseguró que fueron denunciados. "Lo que ocurrió en San Vicente del Caguán fue una masacre de niños", manifestó. Puede leer: Mindefensa reconoce que siete menores murieron en un bombardeo del Ejército Por su parte, el ministro Botero defendió la operación militar. La calificó de "legítima" y aseguró que el Ejército no sabía que en el blanco a bombardear habían menores. El argumento clave del Ministerio de Defensa es que quien violó el Derecho Internacional Humanitario fue el grupo irregular que reclutó forsozamente a los menores y los puso en situación de alto riesgo al confinarlos en un campamento militar. El general Luis Fernando Navarro, comandante de las Fuerzas Militares, también se pronunció. El oficial aseguró que el bombardeo "no fue una operación contra menores de edad", sino "una operación contra el cabecilla del GAO-r7, alias Gildardo Cucho".  La Fiscalía le dijo a SEMANA que tiene dos investigaciones alrededor de este caso: la primera, relacionada con el reclutamiento de los menores. Y la segunda, por las circunstancias que rodearon el bombardeo como tal. El caso también está en conocimiento del Juzgado de Instrucción Penal Militar 124 de la Fuerza Aérea. Sin embargo, ninguna de estas autoridades se había referido al mismo antes de que se diera la denuncia del senador Roy Barreras en el recinto del Senado en el ya famoso debate de moción de censura contra el ministro Botero.En contexto: Liberales y Cambio Radical votarían en bloque en contra del Ministro de Defensa La versión del personero muncipal de Puerto Rico, Caquetá, le agrega un nuevo elemento de debate al asunto. Quedan serios interrogantes sobre cómo se planeó y ejecutó la operación militar, dado que ante organismos de seguridad del Estado habría conocido sobre la situación de reclutamiento de por lo menos tres menores. Ahora estas autoridades deben una explicación.