La conformación de las mesas directivas del Congreso no será tan fácil como muchos lo imaginaban. A pesar de que se deben tener en cuenta los resultados de las elecciones del 13 de marzo, un equilibrio en las fuerzas políticas, los acuerdos entre las colectividades y las posturas de los compromisarios; Roy Barreras anunció que el Pacto Histórico lo quiere todo.

Barreras, quien será el próximo presidente del Congreso y debería ofrecer garantías a todos los sectores, dijo que el Pacto Histórico quiere la presidencia del Senado y la Cámara. Según sus cuentas, la bancada petrista ganó en las elecciones y, por eso, son los llamados a impulsar las reformas que permitan implementar las promesas de campaña de Gustavo Petro.

“La posición del Pacto claramente es que nosotros queremos y vamos seguramente a presidir Senado y Cámara el primer año para sacar adelante las reformas por las que votó el pueblo colombiano y es que el pueblo votó fue por el Pacto Histórico, no se nos olvide ese pequeño detalle, y David Racero es el vocero del Pacto Histórico en la Cámara”, manifestó.

Sin embargo, no hay un antecedente reciente donde el partido de gobierno tenga las dos presidencias al tiempo porque el Legislativo sería sencillamente una especie de notario de la Casa de Nariño. Además, el Partido Liberal y la Alianza Verde han manifestado que también tienen interés en la presidencia de la Cámara.

Justamente se desconoce la postura de la representante Katherine Miranda, quien ha sido postulada por su colectividad y tiene la certeza de que debe haber una pluralidad política en la composición de las mesas directivas. Además, David Racero, después de las elecciones presidenciales del 19 de junio, ha pedido varias presidencias y secretarías para el Pacto Histórico, lo que no es viable políticamente en una democracia.

Barreras dijo además que los partidos que no apoyen a Gustavo Petro no estarán en los cargos importantes de las mesas directivas del Congreso. “Los partidos que perdieron las elecciones no gobiernan, si son independientes o son de oposición, no pueden tener dignidades porque la ley se los prohíbe”.

Como el Centro Democrático, a la espera de la postura de Cambio Radical, es el único partido que hará oposición, Barreras dijo que tendrán todas las garantías.

“Le vamos a dar todas las garantías a la bancada de oposición del Centro Democrático, que implica su presencia en las Segundas Vicepresidencias, su derecho a los debates, a las réplicas del discurso presidencial, a las sesiones especiales de la oposición, tendrán todas las garantías”, añadió.

Sobre este tema, el senador electo Ariel Ávila dijo que entregarle todo el poder del Congreso a la Casa de Nariño no es conveniente. “Lo lógico sería es que el Pacto estuviera en la Presidencia del Senado y la Presidencia de la Cámara podría estar un partido aliado y en este caso estamos aspirando ser nosotros, que somos los hermanos naturales del Pacto, aunque el Partido Liberal también podría, y en el segundo año se cambia el orden”.

Aunque Barreras ya mostró las cartas con las que quiere jugar en la negociación de los partidos políticos, seguramente la discusión que se vendrá es bastante fuerte porque todos los partidos querrán tener alguna representación en los cargos directivos. El caso es que antes del 19 de julio debería estar definida esa composición para los próximos cuatro años.