Una polémica declaración lanzó el ministro de Defensa, Iván Velásquez, en medio de un debate en el Congreso de la República sobre la eliminación del servicio militar obligatorio en el país.

Allí, en medio de su argumentación, el funcionario dijo que Colombia tenía un número desproporcionado de hombres por cada mil habitantes. De acuerdo con las cifras entregadas por el funcionario a los congresistas, el país destina 9,6 uniformados de la Fuerza Pública por cada mil habitantes, mientras que los países de la región y el Caribe tienen en promedio 4,6. Incluso dijo que México el estimativo es de 2,6.

Lo que no aclaró el ministro ante los senadores fue si con esta afirmación buscaba una reducción de las fuerzas armadas del país. Las declaraciones las entregó Velásquez al explicar cómo debería ser el desmonte del servicio militar obligatorio.

“Una implementación de esta propuesta de crear un servicio social obligatorio tendría que considerar varios aspectos, de un lado, como lo afirmaba, la gradualidad, que es indispensable para asegurar la continuidad en la prestación del servicio”, dijo el ministro Velásquez.

Agregó que “no puede hacerse –reitero– una supresión súbita del servicio militar obligatorio, y en la gradualidad siempre tendrá que examinarse por parte de los mandos militares la proporción de sustitución entre los soldados regulares y los soldados profesionales”.

Así mismo, indicó que “la proporción de sustitución de soldados regulares, es decir, a medida que se incrementa soldados profesionales, se debe disminuir los soldados regulares”.

De acuerdo con el Gobierno, lo que se buscará es que no exista servicio militar obligatorio, pero sí servicio para la paz, que consiste en que los jóvenes se vinculen al Ejército para realizar la alfabetización digital en zonas rurales o urbanas; servicio social para el trabajo con víctimas del conflicto armado y la promoción de sus derechos; servicio social para la refrendación y el cumplimiento de acuerdos de paz; servicio social para promover la política pública de paz, la reconciliación, la convivencia y la no estigmatización, y servicio social para la protección de la naturaleza y la biodiversidad.

Según el Gobierno, el servicio social para la paz tendrá una duración de doce meses y una remuneración igual a la del servicio militar.

Sobre este asunto dijo en su momento el senador de la coalición de gobierno, Iván Cepeda, que “el Gobierno y su bancada en el Congreso radicaremos dos iniciativas en materia de paz. La primera será la prórroga de la ley de orden público y su capítulo destinado a la política de paz, ahí vamos, entre otros asuntos, a superar el servicio militar obligatorio para generar la posibilidad de que los jóvenes opten por el servicio social para la paz, que es una alternativa para que ellos se consagren en la construcción de paz y la implementación de los acuerdos”.

“Propongo reemplazar el servicio militar obligatorio por un servicio social de alfabetización digital. Que los jóvenes que salgan de la secundaria enseñen a millones de personas las nuevas tecnologías digitales. Necesitamos que la economía popular, la economía agraria y la familia en general sepan utilizar el nuevo marco tecnológico del mundo”, dijo en elecciones el hoy presidente Gustavo Petro.

Quien también respaldó la propuesta para eliminar el servicio militar obligatorio fue el senador Gustavo Bolívar, quien dijo: “Se vino el cambio. Ministro de Defensa, Iván Velásquez, anuncia eliminación del servicio militar obligatorio (...) Anacrónico que a un joven se le pida la libreta militar y ‘tener la situación militar definida’ para obtener un empleo y para entrar a estudiar. ¡Servicio militar será voluntario! Se viene un nuevo país”.