El pasado 4 de agosto pasó a la historia del país como el día en que se conoció la medida de aseguramiento en contra del senador Álvaro Uribe Vélez. La polémica decisión fue tomada por la Sala Especial de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia tras considerar que el expresidente, en caso de no recibir detención domiciliaria, podría interferir en la investigación que se adelante en su contra por presunto fraude procesal y soborno de testigos en actuación penal. Como era de esperarse, la noticia causó una ola de malestar entre los millones de seguidores de Uribe Vélez y los miembros de su partido, el Centro Democrático. Estos últimos no tardaron en expresar su inconformidad con la medida tomada por los magistrados. Hubo algunos que, a pesar de hacer público su desacuerdo, fueron prudentes y reiteraron su confianza en las instituciones judiciales y el proceso. Otros, más efusivos, señalaron que la Alta Corte tomó la determinación a partir de intereses de carácter político y, en algunos casos, sugirieron un sesgo en favor de ciertos partidos políticos y facciones ideológicas.

Este fue el caso de Rafael Nieto Loaiza, precandidato presidencial del Centro Democrático en 2018, quien aseguró en su cuenta de Twitter que la decisión había sido tomada "por los mismos que liberaron a Santrich".

Otras de las fuertes críticas de la Corte fue la senadora María Fernanda Cabal Molina. La vallecaucana, conocida por sus fuertes posiciones de derecha, publicó un video en el que expresa su apoyo a su "líder" y afirma que la justicia ha sido complaciente con las Farc.

Aún más allá fue Gabriel Jaime Vallejo Chujfi, representante a la Cámara por Risaralda, que desestimó lo que queda del proceso en contra del expresidente Uribe Vélez tras calificar la medida de aseguramiento como una "condena anticipada". 

Pero el pronunciamiento más comentado fue el que hizo el presidente Iván Duque. En un video que compartió a través de sus redes sociales, el mandatario recordó los logros alcanzados durante los ocho años de gobierno de Uribe Vélez y se declaró un "creyente de su inocencia". Expresó, adicionalmente, su "dolor" por la medida de aseguramiento, ya que impedía que "un servidor público ejemplar" no tuviera la oportunidad de defenderse en libertad. Estas afirmaciones, posteriormente, se convertirían en señalamientos hacia el presidente, a quien se le acusó de no respetar la independencia de la Corte Suprema de Justicia.

Mientras todo esto tenía lugar en el país, en el extranjero también se consolidaban opiniones alrededor de lo ocurrido. Una de estas fue la del chileno José Miguel Vivanco, director de Human Rights Watch para el continente americano, que señaló que Uribe Vélez debía "defenderse a través de mecanismos legales, no con amenazas de reforma judicial y acusaciones sin fundamento". Sus palabras estaban dirigidas a la propuesta realizada el pasado 5 de agosto por la senadora Paloma Valencia que, tras enterarse de la decisión de la Sala Especial de Instrucción, planteó la posibilidad de una constituyente que tuviera una reforma al Poder Judicial entre sus principales objetivos. Con el paso de los días, Vivanco se tornó más crítico respecto de las aproximaciones que tenía el uribismo a la investigación de la Corte y exigió que no se ejercieran presiones sobre los magistrados encargados de llevar el caso. Justo hoy trinó sobre el tema y causó sorpresa que lo relacionaran con las Naciones Unidas.

El contenido de su publicación revelaba que Diego García-Sayán, expresidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos y exministro de Justicia de Perú, tenía su mirada puesta "en los ataques a la Corte Suprema de Colombia por parte del uribismo". García-Sayán, quien ahora se desempeña como relator especial de Naciones Unidas sobre la independencia de magistrados y abogados, estaría dispuesto a estudiar la situación que se ha desatado con la detención domiciliaria del expresidente Uribe Vélez. Vale la pena recordar que un relator especial "es un experto independiente nombrado por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU para examinar e informar sobre la situación de un país o de un determinado tema de derechos humanos". Además, es preciso señalar que el comentario de Vivanco tuvo como antesala la pronunciación de García-Sayán sobre la situación de Colombia. Citando una columna del abogado Rodrigo Uprimny en el diario "El Espectador", el peruano consideró "inaceptables" los ataques del Centro Democrático a la Corte.