La captura de Wilson Rafael Anaya Ibarra, conocido en el ámbito criminal como ‘Mello Bolaños’, hubiera pasado desapercibida y como una detención más a un integrante del Clan del Golfo.
Pero la sorpresa se la llevaron las autoridades cuando hicieron el allanamiento a su vivienda. Al llegar al sitio, los agentes se encontraron con que en pleno barrio popular de Santa Marta había un búnker. Se trataba de la vivienda del ‘Mello Bolaños’. La puerta para ingresar a la vivienda contaba con un grado 3 de blindaje. En su interior tenía piscina y colección de motos. Y en los cuartos fueron encontradas joyas en oro, como cadenas y anillos con un alto valor en el mercado.
La historia del ‘Mello Bolaños’
De acuerdo con la Policía, el ‘Mello Bolaños’ contaba con una trayectoria criminal de 13 años, iniciando su carrera delincuencial desde el año 2009 como jefe de sicarios de la organización criminal “Los Paisas”; posteriormente pasa a “Los Nevados”, un grupo ilegal con injerencia criminal en el departamento de Magdalena.
Luego, en 2017, ofreció sus servicios como sicario al grupo de delincuencia común organizada “La Silla”, dedicándose al cobro por la protección de cargamentos de estupefacientes a grandes narcotraficantes en los puertos de Santa Marta, a nombre de alias ‘La Silla’ o ‘Elkin’, con el fin de preservar la seguridad de los envíos.
Debido a su experiencia, alias ‘Mello Bolaños’ fue subcontratado a inicios de 2021 por el máximo cabecilla del Clan del Golfo para tomar el mando de más de 97 integrantes de la Comisión Norte Caribe en los departamentos del Magdalena y La Guajira, para que continuara con el monopolio de las rutas de envío de clorhidrato de cocaína hacia a Centroamérica y Europa.
“Además, era el encargado de ordenar y coordinar homicidios selectivos en esta jurisdicción, siendo considerado por las autoridades colombianas como objetivo de alto valor”, dijo el general Fernando Murillo, director de la Dijín.
Añadió que “la organización criminal le había dado la instrucción a este cabecilla de apoderarse de las rutas de narcotráfico, agrupando a los grupos delincuenciales de la región para traficar conjuntamente y cumplir con la demanda internacional del estupefaciente, para lo que también utilizaba centros de acopio en cercanías al puerto principal y a otros sitios de embarque clandestinos en diferentes playas del sector, en donde controlaba la salida del clorhidrato de cocaína cobrando por cada kilogramo hasta un millón de pesos”.
Alias Mello Bolaños fue dejado a disposición de la autoridad competente por el delito de concierto para delinquir.
Es de recordar que el jefe máximo del Clan del Golfo, alias Otoniel, se encuentra bajo custodia de la Dirección de Investigación Criminal, Dijín, que recientemente ordenó suspender una de las audiencias del capo con la Comisión de la Verdad, hecho que generó una polémica en el país.
Sobre este episodio dijo la Policía en su momento que “es responsabilidad de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol velar por la seguridad de Dairo Antonio Úsuga, en el entendido de evitar cualquier riesgo eventual que pudiera poner en peligro su integridad, pero al mismo tiempo garantizar su detención con el rigor que amerita un caso de seguridad nacional como el de este delincuente”.
Explicó la autoridad que “son varias las diligencias que ya se han llevado a cabo en la sede de la Dijín, gracias a las coordinaciones previas con la Fiscalía General de la Nación y bajo el cumplimiento de todos los protocolos de ingreso y seguridad, los cuales, sin embargo, fueron vulnerados en las últimas horas, cuando de manera irresponsable se hizo pública la descripción exacta del lugar de detención de este individuo”.