Los bienes que fueron objeto extinción de dominio a Pedro Nel Rincón Castillo alias Pedro Orejas, de acuerdo con la investigación que adelantó la Fiscalía General de la Nación, se obtuvieron con dinero producto del narcotráfico, de laboratorios clandestinos que montaron en los departamentos de Boyacá y Cundinamarca, que luego sirvieron para el envío de cocaína a los Estados Unidos y Europa entre el año 2002 y 2015.
Se trata de al menos 700 propiedades que estaban a nombre de Pedro Orejas, de sus familiares y algunas personas que sirvieron como testaferros del señalado narcotraficante extraditado a los Estados Unidos en 2018.
“La Fiscalía General de la Nación, a través de la Dirección Especializada de Extinción del Derecho de Dominio, impuso medidas cautelares de suspensión del poder dispositivo, embargo, secuestro y toma de posesión sobre 770 bienes que pertenecerían al extraditado Pedro Nel Rincón Castillo, alias Pedro Orejas; y varios de sus familiares más cercanos”, dijo la Fiscalía al informar sobre los proceso de extinción de dominio.
Las propiedades, que incluyeron fincas, casas, apartamentos, ganado, vehículos y hasta títulos mineros, estaban avaluadas en más de un billón de pesos, y de acuerdo con la Fiscalía coinciden con el momento de mayor incremento patrimonial para Pedro Orejas y su organización.
“Las propiedades afectadas están representadas en 163 inmuebles, 12 vehículos, dos títulos mineros, cinco sociedades, 565 bovinos y 23 equinos, cuyo valor superaría el billón de pesos”, señaló la directora de extinción de dominio de la Fiscalía, Liliana Patricia Donado.
Las propiedades estaban ubicadas en los departamentos de Boyacá, Cundinamarca y algunas en la ciudad de Bogotá, eran principalmente apartamentos cuyo valor superó los 1.000 millones de pesos y que ahora pasarán a la administración del Estado bajo la supervisión de la Sociedad de Activos Especiales.
“La Fiscalía y la Dijin de la Policía Nacional ocuparon las propiedades en diligencias realizadas de manera articulada en Chiquinquirá, Moniquirá, Simijaca, San Miguel de Sema, Otanche, San Pablo de Borbur, Maripi y Pauna (Boyacá); Paratebueno, Medina y Ricaurte (Cundinamarca); y Bogotá”, explicó la Fiscalía.
Pedro Orejas fue capturado en 2017, no por líos jurídicos que tenía Colombia, sino por un requerimiento de la justicia norteamericana que lo vinculaba a un proceso por narcotráfico. Una corte del distrito sur de la Florida hizo una solicitud de extradición a Colombia, que se hizo efectiva un año después de su captura en los Estados Unidos. Fue condenado a 19 años y medio de prisión por los delitos que motivaron su extradición.
“Alias Pedro Orejas fue capturado en 2017, en cumplimiento de un requerimiento de una corte del Distrito Sur de la Florida. La extradición se hizo efectiva en agosto de 2018 y, recientemente, fue condenado a 19 años y medio de prisión por cargos relacionados con narcotráfico”, advirtió la Fiscalía en un comunicado.
Las ocupaciones con fines de extinción de dominio de alias Pedro Orejas hacen parte de esa estrategia de la Fiscalía para luchar contra la criminalidad atacando el bolsillo de los principales protagonistas de delitos de alto impacto como el narcotráfico. Las cifras de incautaciones durante este año superaron otras, de períodos anteriores en el ente acusador.