Las cifras de desplazamiento forzado, junto con la de víctimas de confinamiento forzado y aquellos que fueron afectados por desastres naturales en el país, no para de aumentar, esto, según el último reporte de la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) en Colombia, la cual emitió las estadísticas obtenidas entre enero y noviembre de 2021, comparándolas con las del mismo lapso de 2020.

En el informe denominado Impacto y Tendencias Humanitarias entre enero y noviembre de 2021, la OCHA informó que durante el tiempo estudiado al menos 72.300 personas fueron forzadas a desplazarse en 159 emergencias masivas, representando un alto aumento respecto a 2020, cuando el país estuvo sufriendo de cuarentenas estrictas por la covid-19.

Según los reportes, el número de emergencias tuvo un incremento del 62 % con respecto a 2020, mientras que el número de personas desplazadas aumentó 196 % en comparación con el mismo periodo de 2020. Para la entidad de la ONU, las principales causas para el alza en las víctimas fueron las amenazas, por Grupos Armados No Estatales (GANE), las cuales llegaron a un 33 % más que en tiempos pasados, los enfrentamientos se encuentran en un segundo lugar, con un 24 % y, los hostigamientos, los cuales se presentaron en un 9 % de los casos.

Durante el período de análisis se reportaron un 36 % más ataques en contra de la población civil en comparación con 2020, lo que también resulta una causa de desplazamiento.

Como dato adicional, la entidad recalcó que solo el 26 % de las personas desplazas en emergencias masivas han podido retornar a sus lugares de origen, mientras que más de 53.150 personas se mantienen desplazadas. Entre tanto, una de las cifras más preocupantes es la que demuestra una alta afectación a menores de edad en medio del conflicto en el territorio nacional, ya que un 18 % de las víctimas de este flagelo son niños, lo que equivale a unos 12.848.

Sin embargo, de los grupos poblaciones que lidera la lista de afectados son los afrodescendientes, con una población de 39.400 víctimas, correspondiente al 54 % del total. Seguido de ellos se encuentran los infantes y, en tercer lugar, están los indígenas, quienes tuvieron 11.113 personas afectadas, es decir, el 15 % de los desplazamientos. Por su parte, las mujeres sumaron un 7 % del total, lo que corresponde a unas 5.200.

Con respecto a las personas obligadas a confinarse en sus casas por parte de grupos armados ilegales, la OCHA indicó que se habían reportado al menos 57.700 personas, en adición, otras 57.500 personas afrontaron restricciones a la movilidad, al acceso a bienes y servicios básicos, debido a imposiciones de los mismos actores armados.

También se encontró que la población más afectada son los indígenas, siendo el 78 % de los confinados, lo que corresponde a 45.171 personas; seguido de ellos están los pueblos afrodescendientes, con el 18 %, equivalente a 10.425 personas; mientras que los niños suman el 2 % y las mujeres el 1 % de los afectados.

Entre las regiones del país más afectadas en el tiempo de análisis, se encontró que están los departamentos de la zona Pacífica, la frontera con Ecuador y Venezuela, los cuales están siendo vulnerados por las acciones armadas de los grupos ilegales; así entonces, con respecto a la violencia armada, durante enero y noviembre de 2021, al menos 239.000 personas resultaron afectadas, al menos 17.400 han sido víctimas de amenazas, más de 1.600 han sido víctimas de homicidios violentos, entre otros hechos.