Durante años se vivió un intenso debate en torno al Coliseo El Campín, un escenario que se inauguró en 1972 y en su momento fue elogiado por su valor arquitectónico pero que con el pasar del tiempo y la falta de obras de modernización se convirtió en un espacio desaprovechado para una ciudad como Bogotá. En el 2011 cuando la edificación volvió a manos del Distrito después de 16 años arrendado a empresas de particulares, en el Concejo de Bogotá se decidió que debía ser renovado ya fuera mediante un reacondicionamiento o la demolición. En ese momento se desató un debate en torno a la posible demolición. Para algunos ciudadanos tenía un valor histórico y debía ser remodelado pero no derribado por lo que se hicieron estudios técnicos para establecer el deterioro de las instalaciones y cuál era la mejor solución. Finalmente se determinó que el Coliseo no si iba a demoler sino que se iba a renovar y el entonces alcalde Gustavo Petro prometió que se iba a llamar Gabriel García Márquez. El 28 de diciembre de 2015 se hizo una primera adjudicación mediante un contrato APP a Cine Colombia pero luego fue descartado por el Instituto de Recreación y Deporte (IDRD) por no haber cumplido los requisitos en el momento de la adjudicación. Ya en la administración de Enrique Peñalosa, se firmó la concesión de la obra con una alianza Colombo-Chilena conformada por quienes manejan la Arena Chile. El consorcio posteriormente negoció un contrato para que el nombre del escenario fuera Arena Movistar durante los próximos 20 años. El pasado viernes se llevó a cabo la inauguración de la Arena Movistar, que tuvo un costo cercano a los 100.000 millones de pesos, con un concierto de Fonseca en el que se hicieron varias pruebas para establecer la calidad del escenario cultural y deportivo antes de su inauguración oficial que será el próximo 3 de octubre con un concierto de Miguel Bose, Juanes y Sebastián Yatra. En el evento de inauguración estuvo presente Enrique Peñalosa y el presidente Iván Duque quienes destacaron el escenario. 

A su vez, el líder de la Colombia Humana no se mostró conforme con el nombre del escenario recordando que él había propuesto el de Gabriel García Márquez y criticó que el actual alcalde hubiera suspendido la construcción de la sede de la orquesta filarmónica.

Además Petro sacó pecho porque fue en su administración en la que  se “estudió y adjudicó” la primera obra mediante APP (Alianza Publico Privada) en Bogotá. Este tipo de contrato consiste en un mecanismo de vinculación de capital privado para la construcción de infraestructura pública y sus servicios asociados.? En el que el público se ve beneficiado por entregarle a otro la responsabilidad de la adecuación y el privado aprovecha para explotar comercialmente, incluyendo el nombre,  el proyecto durante cierto tiempo determinado. Aunque en Colombia no es tan común, en otros países del mundo es normal que los escenarios deportivos o culturales sean patrocinados por marcas que se encargan de su mantenimiento y de su manejo. En Estados Unidos, por ejemplo, hay escenarios como el American Airlines Arena, de Miami, y en Alemania, el estadio en donde juega como local el Bayern Munich se llama Allianz Arena. Según el comunicado en el que se anunció el acuerdo entre Telefónica y el consorcio chileno se destacó que nos es el primer escenario que patrocina esta compañía: "a partir de ahora, el nuevo Movistar Arena Bogotá tendrá el respaldo de una de las principales marcas de telecomunicaciones del mundo, que además ha estado ligada al entretenimiento con el patrocinio de escenarios tan emblemáticos como el O2 Arena de Londres y el Movistar Arena en Santiago de Chile". En cuanto el escenario ha sido recibido con mucha acogida porque le cambia el panorama a la ciudad y de acuerdo a los asistentes al concierto de Fonseca, cerca de 11.000, hubo una notoria mejoría en la acústica con respecto a lo que sucedía en los eventos en el desaparecido Coliseo El Campín.