La historia que deja como víctima a una joven humilde, oriunda del municipio antioqueño de San Andrés de Cuerquia, empezó en enero de 2018. Carolina Urrego Callejas, de 18 años de edad, fue contactada por una pareja de esposos que le prometieron trabajo y estudio en Itagüí, Antioquia.

La joven aceptó la propuesta de trabajo doméstico con la pareja de esposos que fueron identificados por la Fiscalía como a Dany Alejandro Vanegas López, de 37 años, y Daniela Andrea Rojas de 35.

Luego de varios días y de servir como empleada doméstica, los dos esposos tomaron un seguro de vida para la joven, bajo el pretexto de que era un procedimiento de rutina en esa clase de contratos. En la declaración del seguro de vida advirtieron que tenían un vínculo familiar con la joven y por tanto eran los únicos beneficiarios.

El seguro que se pactó fue por 300 millones de pesos y en caso de muerte de la asegurada quienes resultaban como beneficiarios era justamente sus empleadores, los mismos que la contactaron, ofrecieron trabajo y la posibilidad de estudiar si salía de su pueblo para radicarse con ellos en Itagüí.

Tres meses después de viajar a su nuevo trabajo y de comprar el millonario seguro, el 10 de marzo de 2018, la Policía encontró un cuerpo en un costal y en una vía pública de la vereda Los Gómez del municipio de Itagüí. Al principio no se logró identificar, pero conforme la investigación se logró establecer que era Carolina y su cuerpo “presentaba numerosas lesiones provocadas por arma contundente y una herida por arma blanca que le comprometió los pulmones”, señaló el informe de Medicina Legal.

El 27 de abril de 2018, 30 días después del hallazgo del cuerpo, la pareja de esposos inició los trámites para cobrar el seguro de vida, bajo el argumento de tener vínculos familiares con la víctima. Las sospechas fueron inmediatas y en el marco de la investigación que inició la Fiscalía por el asesinato de la joven, se encontraron con una trama macabra.

“De acuerdo con la investigación adelantada por un fiscal de la Unidad de Vida de Medellín, en enero de 2018, Vanegas López y su compañera sentimental Daniela Andrea Rojas García convencieron a la joven Smit Carolina Urrego Callejas, de 18 años, para que se desplazara desde el municipio antioqueño de San Andrés de Cuerquia, para que estudiara y trabajara como su empleada doméstica”, señaló la Fiscalía a través de un comunicado.

La investigación fue tan efectiva que la Fiscalía llegó a un acuerdo con la mujer implicada para aceptar su responsabilidad y pagar una condena de 16 años y 8 meses de prisión, una negociación de la que no participó su esposo, se declaró inocente en un juicio que terminó este lunes con una ejemplar condena en su contra.

“Luego de avalar el material probatorio recaudado por la Fiscalía General de la Nación durante el juicio, el Juzgado 1 Penal del Circuito de Itagüí (Antioquia) sentenció a Dany Alejandro Vanegas López, de 37 años, a una pena de 45 años y 10 meses de prisión, por el delito de homicidio agravado”, explicó la Fiscalía al confirma la condena contra el hombre.

El hombre, a pesar del material probatorio, de la evidencia recaudada por la Fiscalía y de la condena, apeló la decisión de la justicia y ahora será el Tribunal de Medellín quien resuelva si está vinculado y es responsable de macabro crimen que dejó como víctima una joven a quien le prometieron mejorar su situación laboral y que soñaba con la posibilidad de estudiar.