“No hay crimen perfecto”, le dijo el fiscal del caso a Jhonier Leal tras insistir que él fue el responsable de asesinar a su hermano Mauricio Leal y a su mamá Marleny Hernández. Los asesinó con sevicia, dijo la Fiscalía. A su mamá mientras dormía y a su hermano cuando estaba inconsciente por tomar unas pastillas. Luego vino la manipulación de la escena del crimen.
Para el fiscal del caso no hay duda de que Jhonier, luego de asesinar a su mamá y su hermano, inició un plan para ocultar las evidencias que lo incriminaran. Lo primero que hizo fue tratar de borrar los rastros de sangre que estaban en las habitaciones y en los pasos comunes de la casa ubicada en un exclusivo condominio de la vía a La Calera.
Después, y tras asesinar a su mamá, cambió las sábanas de la cama, que justamente era el escenario del crimen, pasó luego a la habitación de su hermano y allí retiró las cobijas, seguramente, dijo el fiscal, porque ambos elementos tenían impregnada la sangre de las víctimas.
Las declaraciones de varios testigos, entre ellos empleados de servicio que trabajaban en la casa, fueron fundamentales para establecer un contexto respecto a los cambios en las cobijas y las sábanas de las dos habitaciones. Era algo inusual que además estaba a cargo de ellos, los empleados, tenían claro que no eran ni las cobijas, ni las sábanas que estaban horas antes del crimen.
“En su lugar de habitación en donde ella se encontraba dormida y luego Jhonier se desplaza hasta la habitación de tu hermano, Mauricio Leal Hernández y Oh sorpresa… Jhonier que con el mismo cuchillo que atacas a tu señora madre atacas a tu hermano Mauricio Leal Hernández, con la mala fortuna Jhonier que ese cuchillo se quedó incrustado en el cuerpo de Mauricio. Posteriormente haces un recorrido hasta la cocina para traer otro cuchillo para generar ciertas heridas”, señaló el fiscal.
Otro hecho que llamó la atención de los investigadores y de la empleada de servicio en la casa de Mauricio Leal, fue encontrar los traperos y productos de aseo en la terraza de la habitación de Jhonier Leal, cuando estos elementos estaban o estuvieron hasta ese día cerca de la cocina.
Con luces ultravioleta la Fiscalía logró establecer que existió un rastro de sangre desde la habitación de Marleny Hernández hasta la de su hijo, Mauricio Leal, donde finalmente fueron encontrados los cuerpos. Ese rastro de sangre se extendió por la escalera y reforzaría la hipótesis de que a la mujer la asesinaron en su cama y para manipular la escena trasladaron el cuerpo.
“El lunes 22 de noviembre, siendo las 2.34 de la tarde cuando son encontrados los cuerpos en la habitación, al interior de la habitación sobre la cama doble, los cuerpos sin vida de tu hermano Mauricio Leal Hernández y tu señora madre Marleny Hernández Tavárez, presentando signos de violencia con múltiples heridas con arma blanca”, dijo el fiscal.
Los investigadores encontraron rastros de sangre, también en la cañería del baño de Jhonier Leal, sin embargo, la situación y el uso de este baño impidieron a los forenses obtener un perfil genético que ayudara a establecer de quién era la sangre encontrada en esa cañería. Un nuevo hecho que se suma a la hipótesis manejada por la Fiscalía sobre la manipulación de la escena del crimen.
En resumen, de acuerdo con la Fiscalía, Jhonier Leal, luego de asesinar a su hermano y su mamá, decidió borrar las evidencias y esconder algunos elementos que terminaron impregnados con la sangre de las víctimas, pero algunos cabos sueltos terminaron por revelar lo que ocurrió exactamente en esa casa, un doble asesinato, según el fiscal a cargo.