Ernesto Macías se le adelantó a la Procuraduría. De acuerdo con un documento que el expresidente de Senado publicó en su cuenta de Twitter, él y su abogado, Jaime Lombana, solicitaron que se asigne una fecha para dar su versión libre de lo ocurrido el pasado 20 de julio, antes de que esta entidad lo citara a un juicio disciplinario. 

De acuerdo con Macías, entregará "los elementos de prueba pertinentes" para esclarecer la investigación que hay en su contra por la "jugadita" que hizo el último día como presidente del Senado. Sin embargo, el hecho de intentar sabotear la intervención de la oposición no fue tan inocua como luego él quiso dar a entender ante los medios de comunicación. La Procuraduría General de la Nación lo citó a audiencia de juzgamiento disciplinario “por el presunto incumplimiento del Estatuto de la Oposición, Ley 1909 de 2018, durante la instalación de las sesiones del Congreso, el pasado 20 de julio”. Puede leer: La “última jugadita” de Macías para sabotear la oposición. Hay que recordar que en su último día como presidente decidió sabotear la intervención del senador del Polo Democrático, Jorge Enrique Robledo, quien era el encargado de ejercer el derecho de réplica de la oposición. Su plan de saboteo quedó grabado gracias a una cámara de Noticia Caracol y a que el micrófono que tenía estaba encendido. Su plan era que evitar que el presidente Duque escuchara la réplica. Macías dijo: “Nos toca por obligación que ellos hablen después del presidente y entonces le pido a la comisión que acompañe al presidente y los saco de aquí… Esta es mi última jugadita de presidente”. Según la procuraduría, “el juzgamiento verbal contra Macías que inició de oficio el Ministerio Público, se da con la evidencia encontrada por la no inclusión en el orden del día de la intervención del vocero (a) de los partidos políticos declarados en oposición, conforme los documentos allegados al expediente y lo registrado en el video de la transmisión oficial de la jornada de instalación de las sesiones del Congreso, el sábado 20 de julio, que también fue incorporado al expediente”. Le puede interesar: Las implicaciones que podría tener la "última jugadita" de Macías a la oposición. La Sala Discipliaria averiguará por qué no permitió la intervención de Robledo inmediatamente después de la intervención del presidente del República y, al contrario, decretó un receso, “con lo que habría interrumpido el desenvolvimiento de la sesión, y contrariado el régimen y la finalidad de las normas que regulan los derechos de la oposición”, con lo que habría incumplido los artículos 1, 2, 111, 112 y 141 de la Constitución Política; y los 3, 5 y 14 del Estatuto de la Oposición; el 13 de la Resolución 3134 de 2018 del Consejo Nacional Electoral, y el 19 de la Ley 5 de 1992 que es el reglamento del Congreso. La Procuraduría califica esta acción de Macías como grave a título de dolo por presunta violación a los principios a la igualdad, imparcialidad, a la participación política efectiva y al pluralismo político, y a la moralidad.