El Gobierno de Venezuela emitió este lunes un comunicado en el que repudia lo que considera “una campaña de agresión sistemática que desde Colombia, en conjunto con sectores empresariales y mediáticos” se viene realizando en contra sus instituciones.El documento dice líneas más adelante que “el presidente Juan Manuel Santos traiciona la historia común de independencia y libertad, al tiempo que da una estocada por la espalda al país que lo ayudó a construir la paz”.Puede leer: “Venezuela es un país que se muere de hambre”: María Corina MachadoEl texto emitido desde Caracas va más allá e incluso habla de “ardid, mala fe y doble moral”. Según ese Gobierno, los contantes comunicados de Colombia frente a su situación interna son una violación de principios fundamentales del Derecho Internacional como el de la no injerencia en asuntos internos, la autodeterminación de los pueblos y el respeto a la soberanía de los Estados, los cuales, dicen, “son esenciales para la convivencia pacífica y el desarrollo de relaciones bilaterales de amistad y cooperación”.Para Venezuela, la posición del Gobierno de Santos frente a su situación interna, es una estrategia para oculta problemas propios: “Resulta absolutamente cuestionable que ante los gravísimos problemas que aquejan al hermano Pueblo colombiano, las grotescas cifras de violencia, de desapariciones forzadas, de pobreza, exclusión, de incremento del narcotráfico y represión, entre otras, perfectamente documentadas por organismos internacionales, se pretenda -en el mejor de los casos- ocultar las responsabilidades del gobierno de Colombia atacando a Venezuela”.Consulte: La constituyente venezolana : receta cubanaParte de los argumentos de Venezuela se centran en decir que, “según el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Colombia es uno de los países más desiguales, ocupando el puesto 12 de 168 países en desigualdad en el ingreso, y acceso a la educación y la salud entre hombres y mujeres. De acuerdo al Departamento Administrativo Nacional de Estadística de Colombia (DANE), la población que vive por debajo de la línea de pobreza alcanza el 28%, lo cual representa un aumento del 0,72% con respecto a 2015”.Pero no solo eso, el Gobierno de Maduro puso de presente, que “la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) 2015, incluyó a Colombia en la lista de países con Hambruna causada por Conflictos, estimando que un 12% de la población colombiana necesitaba con urgencia asistencia humanitaria. Mientras tanto, estimaciones más recientes confirman que aún un 9% de la población está desnutrida, lo que evidencia la incapacidad del Estado colombiano para atender a su población”.Sin citar ninguna fuente, el comunicado además dice que “organizaciones especializadas en materia carcelaria indican que el número de presos políticos en Colombia está por el orden de las 9.500 personas”. Líneas más adelante, el Gobierno de Maduro arremete con lo siguiente: “Esto demuestra que el Estado colombiano encarcela a sindicalistas, documentalistas, estudiantes, artistas, campesinos, maestros, luchadores sociales, bajo montajes judiciales, con la finalidad de criminalizar la lucha social y política”.El resto del comunicado se centra en dar cifras del conflicto colombiano: “El Centro Nacional de Memoria Histórica contabiliza 60.630 personas desparecidas en los últimos 45 años, esto equivale a 112 personas desaparecidas por mes y casi 4 personas por día. Adicionalmente, el pasado 30 de abril de 2017, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos informó que en los primeros cuatro meses del año han sido asesinados 41 defensores de DDHH en Colombia, es decir casi 3 defensores de derechos humanos son asesinados diariamente en Colombia”.Venezuela no deja por fuera en sus descargos el aumento de cultivos ilícitos en los últimos años: “Pero, aún más grave, resulta el incremento en un 37% de la producción de cocaína en Colombia según cifras publicadas en el Informe Mundial sobre las Drogas 2016 (ONU), que transversaliza, además, el aumento en la incidencia de delitos transfronterizos y de la criminalidad paramilitar”.El comunicado termina diciendo que Venezuela rechaza categóricamente “el doble rasero y el sesgo del gobierno colombiano para atacar a Venezuela, al tiempo que hace un nuevo llamado para que en aras de la paz, de las buenas relaciones que entre vecinos deban desarrollarse, en función de la hermandad histórica entre nuestros pueblos, desistan de interferir en los asuntos internos de Venezuela”.