A Rosa Cotes Vives los samarios no la conocen como una política aguerrida de las que llegan al Congreso luchando por los derechos civiles de las minorías. Tampoco es una líder local que batalla para mejorar las necesidades básicas insatisfechas, ni le han oído pronunciamientos duros contra la violencia que ha vivido Magdalena. Tampoco ha manifestado su preocupación por los problemas ambientales que generan la producción de carbón o el deterioro de la Ciénaga Grande, pero Rosa es la candidata a la Gobernación con mayor respaldo político para las próximas elecciones de octubre. Los samarios comenzaron a conocer a Rosa Cotes cuando se desempeñó como primera dama de la capital de Magdalena, entre el 2004 y el 2007, período en el cual su esposo -José Francisco ‘Chico’ Zúñiga- fue alcalde. Él, sin embargo, cayó en desgracia después de ser condenado por recibir apoyo de los paramilitares. No obstante, su Rosa volvería al poder cuatro años después como ‘gestora social’ del departamento, acompañando al gobernador Luis Miguel el ‘Mello’ Cotes Habeych, su sobrino. Y los augurios de triunfo electoral para Rosa como candidata son enormes, pues cuenta con un hecho inédito en la política samaria: todos los jefes políticos del departamento están unidos alrededor de su proyecto electoral gracias a una jugada de su sobrino, que hizo que todas las familias políticas ingresaran al gabinete. Por ejemplo, al exsenador Miguel Pinedo Vidal, que tiene la franquicia de Cambio Radical para La Guajira y Magdalena, le dieron la Secretaría de Educación al nombrar a un viejo militante del pinedismo, Bernardo Noguera. Se trata de un departamento que ocupa el penúltimo lugar en las pruebas Saber. Se sabe también que un representante a la Cámara le ‘dieron’ la administración del hospital Fernando Troconis, mientras que a otro congresista conservador le entregaron el manejo de la Secretaría de Infraestructura, para que construyera carreteras y puentes en un departamento incomunicado, lleno de carreteras polvorientas en verano y fangales intransitables en invierno. También, aseguran las fuentes políticas en Santa Marta, al último gran elector, el exgobernador Jorge Caballero Caballero, tendría injerencia en las secretarías de Tránsito, Salud y la Oficina de Atención y Prevención de Desastres. La Información asegura que, de igual forma, los políticos Luis Eduardo Vives y Roberto Herrera recibieron algún tipo de participación en la administración. Como único opositor de Rosa Cotes queda en campaña Jorge Luis el ‘Negro’ López, un exdiputado que respaldó al ‘Mello’ en su aspiración. El ‘Negro’ se convirtió en un acérrimo crítico con el gobierno de Cotes al que le cuestiona la mala administración de los hospitales. También pide que se revise la contratación de la alimentación escolar, pues esta se realiza con fundaciones y no alcanza, pese a tener un presupuesto de 60.000 millones de pesos. Hace cuatro años, cuando el Partido Liberal le retiró el aval al Mello, éste recogió 160.000 firmas en 12 días para poder inscribir su candidatura. Ahora no se sabe qué partido avalará a su tía. Se avizora, eso sí, alianzas con Cambio Radical y la familia Char. Magdalena espera que la tía Rosa, si ha de ser elegida, cumpla las promesas de su sobrino en materia de infraestructura, erradicación de la pobreza, desempleo y sacar a la educación del penúltimo lugar en el ranking nacional.