A pocos minutos de que inicie la audiencia de testimonios en el proceso contra el fiscal Mario Burgos, quien investiga a Nicolás Petro, SEMANA pudo confirmar que al interior de la Comisión Nacional de Disciplina Judicial se hicieron varios cambios sobre el magistrado que quedará al frente de ese caso por un vínculo de una funcionaria de esa organización con el actual presidente Gustavo Petro.
Fuentes de la Comisión de Disciplina Judicial le confirmaron a SEMANA que el pasado 26 de abril la magistrada Acosta, presentó ante la Sala Plena de esa corporación una manifestación de transparencia en la que aclaraba que durante la alcaldía de Bogotá de Gustavo Petro, fue funcionaria de esa administración.
La hoy magistrada Acosta trabajó en un cargo directivo con funciones de representación judicial y legal de la Empresa de Telecomunicaciones de Bogotá - ETB desde el 16 de marzo de 2012 hasta el 16 de febrero de 2016.
La Sala se reunió el 30 de abril, un día antes del día del trabajo, y decidieron que bajo esa aclaración, la mejor opción era dejar por fuera a la magistrada Magda Victoria Acosta del caso que se adelanta contra el fiscal Burgos, y se reasignó al magistrado Alfonso Cajiao Cabrera, actual presidente de la Comisión Nacional de Disciplina Judicial.
Este caso se suma a los posibles conflictos de interés que tendría la magistrada Acosta para llevar ese proceso, pues además de su vínculo con Gustavo Petro en la Alcaldía de Bogotá, la Silla Vacía publicó a principios de abril la cercanía que tendría esa toada con Vladímir Fernández, el exsecretario jurídico de la Casa de Nariño y hoy magistrado de la Corte Constitucional.
Acosta y Fernández fueron compañeros de carrera en la Universidad Externado de Colombia, y esa cercanía de vieja data, empezó a generar suspicacias frente al proceso contra el fiscal Burgos, que, en caso de ser sancionado, tendría un efecto colateral en el proceso que se adelanta contra Nicolás Petro por enriquecimiento ilícito y lavado de activos.
SEMANA se comunicó con Magda Victoria Acosta y Vladímir Fernández para confirmar su amistad, pero aunque reconocieron que fueron compañeros de universidad, rechazaron tajantemente que esa cercanía pudiera intervenir en el proceso contra el fiscal Burgos.
“No tengo ninguna relación, no tengo nada que ver con ese tema, no sabía de esa decisión o investigación de la magistrada Magda, no sé en qué etapa está, y nunca he tenido ni siquiera una conversación con ella para este tema. La conocí en la universidad, como estudiantes, nunca hemos trabajado juntos y nunca he hablado de ese tema con ella, en absoluto”, dijo el magistrado Fernández.
Mientras que la magistrada Fernández, aseguró que “sobre este tema no hay mucho que decir. Soy de su misma promoción y desde esa época lo conozco. Nunca he trabajado con él, siempre he sido servidora pública y con 20 años en la rama judicial”.