Un hecho lamentable se presentó en medio de un operativo que adelantaba la Corporación Autónoma de Cundinamarca (CAR) para rescatar a un mono ardilla en el municipio de Granada. Después de ser alertados, los funcionarios se trasladaron a una vivienda en compañía de la Policía Nacional y la Unidad Municipal de Asistencia Técnica Agropecuaria (Umata).

Tras anunciarle al dueño del animal el procedimiento que se iba a adelantar, este “prefirió estrangularlo”, resistiéndose a entregárselo a las autoridades que le iban a brindar rehabilitación biológica y manejo médico veterinario para retornarlo a su hábitat. Por estos hechos fue detenido de manera inmediata.

La CAR indicó que esta persona incurrió en una violación a la Ley 1774 de 2016, que señala que “cualquier persona que haga daño a un animal o atente contra su integridad física incurrirá en pena de 12 a 36 años de prisión. Esperamos que caiga todo este peso sobre esta persona”.

La Fiscalía General le imputó los delitos de aprovechamiento ilícito de recursos naturales agravado y maltrato animal en los mismos términos. El procesado se declaró inocente. Alejandro Gaviria, coordinador del grupo especial para la lucha contra el maltrato animal de la Fiscalía (Gelma), detalló que pese a que el ente investigador pidió una medida privativa de la libertad del hombre, el juez de control de garantías no aceptó esta petición al considerar que no representaba un peligro para la sociedad.

“Recordamos que capturar, vender, comprar, transportar o tener fauna silvestre genera graves consecuencias físicas y emocionales a los animales”, señaló el ente investigador.

Gaviria indicó que “la tenencia de cualquier animal silvestre por fuera de las causas de la ley genera un aprovechamiento ilícito de los recursos naturales. Este tipo de primates son muy aprovechados, lastimosamente, como mascotas. Se nos olvida que tener un animal de estos es tener un secuestrado de otra especie”.

Desde la CAR y la Fiscalía General hicieron un llamado para que se denuncie cualquier tipo de tráfico de especies silvestres, indicando que en esta época del año aumenta considerablemente la venta de animales en las vías del país y por internet, ya que se ven como un regalo.

La Fiscalía General adelantó, en 2021, 172 imputaciones de cargos relacionados con maltrato animal, logrando 70 fallos condenatorios.

Por su parte, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible calculó que se ha presentado un aumento exponencial entre 1992 y 2021 en la incautación de animales.