Ante el llamado de la Fiscalía General al expresidente Álvaro Uribe este martes 9 de abril, por presunto fraude procesal y soborno a testigos, el exmandatario envío un corto pero contundente mensaje sobre lo que será su pronunciamiento sobre la radicación ante la Corte Suprema de Justicia del escrito de acusación.
Uribe señaló ayer en su cuenta de X: “Mañana temprano (miércoles) procuraré dar una opinión sobre la acusación”.
El mensaje del exmandatario se dio en medio de la situación que próximamente afrontará ante el ente acusador. Los detalles de la investigación se resumen en el documento de 13 páginas que el ente acusador presentó ante los jueces penales del circuito de Bogotá.
Dice el ente acusador que el expresidente Uribe, junto con otras personas, se encargó de idear la forma de obtener algunas declaraciones que no correspondían con la realidad, con el objetivo de favorecerse él y a su hermano Santiago Uribe, mientras insistían en controvertir las versiones en su contra por otros testigos.
“Contando con apoyo consciente, deliberado y sistemático de múltiples personas, bajo la coordinación, la dirección y con el beneplácito, patrocinio o aval suyo, materializó la estrategia que idearon para lograr testimonios, documentos u otros medios probatorios que dieran cuenta de hechos o situaciones parcialmente ciertos o que no correspondían con la realidad y que les sirviera para falsear o colocar en duda versiones contra él y su hermano Santiago”, señaló la Fiscalía.
Los testimonios que el expresidente trató de afectar, según la Fiscalía, fueron los rendidos por Pablo Hernán Sierra García y Juan Guillermo Monsalve Pineda, justamente los testigos que cursan en contra del exmandatario y que ahora lo tienen con una acusación formal ante los jueces de Bogotá, y que hace tres años lo tuvo bajo medida de detención domiciliaria.
El fiscal primero delegado ante la Corte Suprema de Justicia señaló en la acusación que el expresidente Uribe “determinó” al abogado Diego Cadena para que se ofreciera dinero u otros beneficios a los procesados, con el objetivo de cambiar las versiones que habrían entregado a la Corte Suprema de Justicia, cambiando la verdad o que simplemente no entregaran más versiones a las autoridades.
“Uribe Vélez determinó al abogado Diego Javier Cadena Ramírez para que, directamente o por interpuesta persona, entregara y/o prometiera dinero u otras utilidades a seleccionados testigos de hechos delictivos, para que faltaran a la verdad o la callaren total o parcialmente en las actuaciones penales aludidas. Al mismo tiempo, con tan específicos actos, indujo a error a la Sala de Instrucción N° 2 de la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia, para obtener estas decisiones contrarias a la ley”, señaló el documento.
Una decisión ante la cual el país reaccionó, debido a este sorprendente giro en el proceso del expresidente, dado que hubo dos solicitudes de preclusión previas a esta decisión.
“Yo espero que no sea una cacería política. Yo creo que realmente lo que necesitamos es que se sepa la verdad, pero que esto no se vuelva cuenta de cobro. Eso no le ayuda a la paz. Yo no sé qué haya en ese expediente, yo quiero que haya verdad y haya justicia, pero que esa justicia no tenga color político, que no sea represalia”, indicó Ingrid Betancourt, excandidata presidencial y líder del Partido Verde Oxígeno.
La senadora, Paloma Valencia, manifestó: “El inicio del juicio al presidente Álvaro Uribe Vélez, que es inocente y que le ha servido tanto a este país, es el complemento perfecto a este gobierno, que pretende desconocer todo lo que tiene Colombia y destruir todo lo que sea valioso”.
La defensa del expresidente precisó que no habían sido notificados: “Esta defensa informa que no ha recibido notificación de esa decisión ni traslado del escrito de acusación”, detalló el abogado Jaime Granados en su cuenta de X.