La Asociación Colombiana de Sociedades Científicas (ACSC), gremio que agrupa y representa actualmente a 69 organizaciones de médicos especialistas en el país, se unió a la marcha del próximo domingo 21 de abril denominada Batas blancas en silencio, que busca manifestar el desacuerdo de los profesionales de la salud con el manejo del Gobierno del presidente, Gustavo Petro, al sistema.
A través de un comunicado, la organización afirmó que las observaciones, peticiones y contribuciones de los médicos especialistas frente a la estructuración de cualquier proyecto de reforma a la salud no han sido tenidas en cuenta.
“Ante la situación actual de salud en Colombia, los médicos especialistas como uno de los actores principales del sector, exigimos que se cumpla con la Ley Estatutaria de la Salud y especialmente el artículo 12 que establece que la participación en la formulación de políticas, regulación y demás decisiones vitales del sistema es un derecho fundamental que tienen los actores del sector, y en este caso los médicos especialistas, quienes a pesar de haber sido convocados en distintas instancias para participar en las iniciativas en torno a la estructuración del sistema y se han realizado aportes, sus observaciones, peticiones y contribuciones no han sido tenidas en cuenta, excluyéndolos de cualquier proyecto”, señaló.
Para la asociación, cualquier iniciativa de reforma debe partir del desarrollo de la Ley Estatutaria de Salud de 2015 (LES), a través de “los mecanismos legislativos o administrativos adecuados para ello”.
Adicionalmente, manifestó que las modificaciones planteadas al sistema de salud, independiente del momento político, deben ser el resultado del análisis y mesas de trabajo en donde “todos los actores tengan una participación activa, de forma que el debate se construya basado en la experiencia y conocimiento de las partes que lo componen. Los médicos del país insistimos en contar con una participación protagónica en la construcción de todos y cada uno de los proyectos que impliquen modificaciones al mismo”.
“Ningún cambio que se quiera realizar en el sistema de salud, por mínimo que sea, puede afectar la salud de la población y de la misma manera, cualquier transición debe garantizar la protección de los derechos de continuidad de las terapias y tratamientos que corresponden a los pacientes, especialmente aquellos con enfermedades crónicas, catastróficas y huérfanas”, agregó.
En la parte final del texto, la organización afirmó que se requiere “tomar las medidas necesarias para que ni los pacientes, ni el talento humano en salud se vea afectado por las decisiones que se tomen durante esta etapa de transformación”.
“Los médicos somos actores esenciales del sistema de salud, e igualmente somos pacientes. Propendemos por la salud de todos los colombianos de forma independiente, ajenos a los partidos o inclinaciones políticas”, dijo.
“Por ello, consideramos que cualquier forma de manifestación pacífica debe ser respetada e interpretada como una declaración legítima ajena a estos intereses”, subrayó.