Marelbys Meza, quien se desempeñó como niñera del hijo de Laura Sarabia, hoy directora del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República, acusó a su exempleadora de ordenar el polémico polígrafo y las chuzadas en su contra tras el robo de un dinero en la casa de la funcionaria.

En entrevista con SEMANA, la exniñera de Sarabia contó cómo llegó a trabajar con quien fuera la jefe de gabinete del presidente Gustavo Petro. Entre las declaraciones, dijo que antes trabajaba con Armando Benedetti, también cuidándole los niños.

“Duré siete años con ellos y ahí conocí a Laura. Cuando Laura llegó, yo estaba presente ya. A Laura le decía que era una hija para mí, porque tiene la misma edad de mi hija. Todo fue bien. Nunca hubo un llamado de atención, nunca nada, todo fue bien”, comentó Meza.

Sobre el robo, reveló que se presentó un viernes en la tarde, luego de un viaje de Sarabia a Boyacá. “La teniente llevó un maletín muy pequeño. Era la ropa de ella. La teniente me dijo: ‘Mire, aquí le traigo la ropa de la doctora, porque ella se fue a una reunión que tenía en casa de un amigo de ella’”.

Marelbys explicó que “la teniente le llevó el maletín. Era pequeño, era ropa de dos días. Tampoco era otra cosa. Hablan de documentos, eso es mentira. ¿Cuáles documentos? ¿De qué documentos me hablan? Nada de eso”, al hacer referencia a los hechos por los que la culpan.

La exniñera de Laura Sarabia se destapó en entrevista con SEMANA y acusó a la directora del Dapre de ordenar el polémico polígrafo y las chuzadas en su contra tras el robo de un maletín con dinero en efectivo de la funcionaria. “Que diga la verdad”. | Foto: Fotomontaje de SEMANA

Fue enfática en afirmar que “no sabía que había plata ni nada”, al tiempo que contó la historia de la llamada de Andrés, el esposo de Laura Sarabia, quien después de tres días le pidió que fuera urgente a la casa, porque al parecer algo andaba mal.

“El maletín lo entregaron el viernes en la tarde. Entonces, el domingo, a la una de la tarde, yo cumplía años en esos días, mi familia me iba a hacer un almuerzo. Andrés (esposo de Laura) me llamó. Estaba con mis hermanos y mi mamá, comprando lo del almuerzo, y él me llamó y me dijo: ‘Mary, ¿tú sabes del maletín de Laura que trajo de Boyacá?”. Le dije: “Sí, ahí está en la sala”. Después me volvió a llamar y me dijo: “Mary, necesito que te vengas ya, urgentemente, al apartamento”.

También relató que la propia Laura Sarabia le dijo que se le iba a realizar la prueba del polígrafo y que la sentenció con una frase clave: “Esto no se queda así, voy a llegar hasta las últimas consecuencias”, relató Meza sobre lo que le dijo Sarabia.

Ella recordó que le respondió: “Listo, no debo nada, usted cree que si yo necesitara plata, pues, le decía que me prestara”. Sin embargo, el día lunes la llamó una de las tenientes, de la que no recuerda el nombre, y le aseguró que ya tenía hora para realizar el polígrafo.

“Y me llevaron hasta allá, hasta el Palacio de Nariño, y ahí (al frente) es donde está el sitio del polígrafo. Llegamos a la entrada. Harold (el conductor de Laura) llamó a la teniente Luna y me puso ahí en la entradita de donde hacen el polígrafo”, relató.

También reveló que tuvo una conversación con Sarabia, en la que le contaba que una amiga suya le dijo lo del tema del robo que había visto en medios de comunicación

Sobre el viaje a Venezuela, porque se esperaba que volviera a trabajar para Armando Benedetti, la exniñera comentó que lo hizo en una avioneta “donde trasladaban al presidente cuando estaba en campaña”, pero aseguró que “era alquilada”.

“Me la puso don Armando porque quedé de encontrarme con él en Barranquilla, porque él estaba allá. O sea, imagínese cómo fue ese viaje de Bogotá a Barranquilla sola. La avioneta arrancó de Guaymaral hacia Barranquilla. Y allá me encontré con don Armando y de ahí sí nos fuimos hacia Venezuela”, dijo.

Meza resaltó que Benedetti le preguntó por lo que había pasado con Laura Sarabia y le contó que él se la había llevado para Venezuela “porque Laura me pidió el favor de que me la trajera para acá para que no la denunciara”.

“Le dije: ‘¿Eso le dijo ella? Pues me da mucha pena, pero me devuelvo’. ‘¿Usted cuándo se devuelve?’, me dijo. ‘Yo tengo una cita la otra semana’, me aseguró. Entonces, le dije: “Me voy con usted”. Benedetti me dijo: “No, mija, quédese acá. Mire, allá corre peligro”. Y le dije: ‘No, señor, porque no debo nada. No tengo por qué esconderme’. La que tomó la decisión de venir a denunciar fui yo. Sentía que ella me estaba dando la puñalada trapera”, resaltó Meza.