El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, es el protagonista del nuevo capítulo en el escándalo de corrupción que enloda a la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD). Conversaciones de WhatsApp y declaraciones ante la Fiscalía, sugieren que Bonilla hace parte de una presunta red de influencias para la adjudicación de contratos millonarios.
Según la información revelada, Sneyder Pinilla, exsubdirector de la UNGRD, habría coordinado con el ministro de Hacienda y su asesora, María Alejandra Benavides, la entrega de contratos en tres municipios: Carmen de Bolívar, Saravena y Cotorra, por un valor total que supera los 90 mil millones de pesos.
Los chats comprometedores no solo involucran a Pinilla y al ministro, sino también a Jaime Ramírez Cobo, presunto enlace entre el Ejecutivo y el Congreso, y a personas cercanas a Laura Sarabia, directora del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre). La gravedad de las acusaciones radica en que estos contratos habrían sido utilizados para favorecer a seis congresistas, buscando asegurar su apoyo en la votación de las reformas propuestas por el gobierno de Petro.
Desde varios sectores políticos y de la sociedad civil se han pronunciado sobre este nuevo y penoso capítulo en la UNGRD. Uno de los pronunciamientos que más ha resonado es el de Margarita Rosa de Francisco, acérrima defensora del petrismo, quien pidió al presiente Gustavo Petro que retire del cargo al ministro Ricardo Bonilla.
“Qué mal se ve lo del ministro de Hacienda chateando con ese par de hampones. Esperamos una explicación que no sea para idiotas y que el presidente lo remueva de su cargo”, pidió De Francisco en la red social X.
De igual forma, la actriz y presentadora aseguró que la política en Colombia es una “ratonera saqueada” por “poderosos”.
“Qué ratonera tan brava ha sido el juego político en Colombia, país saqueado por empresarios poderosos, multinacionales, mafiosos y políticos de medio pelo. Así no hay programa de gobierno que sirva, por más bello que sea”, añadió en su publicación.
El actual ministro de Hacienda, quien asumió el cargo el 1 de mayo de 2023 tras la salida de José Antonio Ocampo, se encuentra ahora en el centro de esta controversia que amenaza con desestabilizar aún más al gobierno actual.
Este escándalo se suma a una serie de dificultades que ha enfrentado la administración Petro, poniendo en tela de juicio la transparencia en la adjudicación de contratos públicos y la ética de algunos de sus funcionarios más cercanos.
Entretanto, se ha cuestionado que la Fiscalía General, a cargo de Luz Adriana Camargo, no le ha abierto ninguna investigación pese a la contundencia de las declaraciones y pruebas que han dado el exdirector de la entidad, Olmedo López, y el exsubdirector, Sneyder Pinilla.