Tras la polémica que se desató entre el Palacio Liévano y la Casa de Nariño por la creación de un comando conjunto para perseguir los delitos cometidos por venezolanos, que fue anunciado por la alcaldesa Claudia López y desautorizado por el presidente Iván Duque, SEMANA revela las cifras de extranjeros capturados por cometer delitos en el país.
Las cifras de la Policía indican que en lo corrido de este año han sido capturados en el país 11.038 extranjeros. De estos, más de 2.500 fueron en la capital del país y los principales delitos por los cuales han sido detenidos son hurto, narcotráfico, homicidio y concierto para delinquir.
Para el caso de la capital del país, en Bogotá se han realizado más de 17.000 capturas este año, de las cuales 2.470 fueron contra extranjeros. 500 fueron cobijados con medida de aseguramiento y el restante quedó en libertad, es decir, cerca del 80% no fueron enviados a prisión porque el delito no lo ameritaba o había problemas con su identificación, según las autoridades de la capital.
Estas cifras son el principal argumento de las administración distrital para tomar medidas. Por eso, esta semana la alcaldesa Claudia López dijo que “Bogotá será la primera ciudad de Colombia que tendrá el 100 % de la población migrante debidamente registrada e identificada, para que puedan acceder a los servicios que ofrece el Distrito, pero también para que quienes estén delinquiendo puedan ser judicializados”.
De igual manera se conoció que en 2020 en Bogotá fueron detenidos 2.641 extranjeros cometiendo delitos, de los cuales 2.590 fueron de ciudadanía venezolana. Los restantes fueron 21 de Ecuador, 9 de República Dominicana, 5 de Perú, 2 de Argentina, 2 de Cuba, entre otras nacionalidades.
Para este año las cifras de extranjeros capturados en Bogotá son: 2.656 y sus nacionalidades son 2.592 venezolanos, 37 Ecuador, 10 República Dominicana, entre otros.
La polémica
El pasado miércoles, luego de realizar un consejo de seguridad con el director de Migración Colombia, la alcaldesa Claudia López indicó que se había tomado la decisión de crear un comando conjunto con dicha entidad para identificar a los venezolanos que se vieran involucrados en delitos.
Luego de varias horas, el director de Migración Colombia desmintió a la alcaldesa e indicó que esa no fue una decisión del consejo de seguridad y de inmediato se armó la polémica entre la alcaldesa Claudia López y el presidente Iván Duque.
El director de Migración dijo que no le correspondía a él tomas decisiones sobre la creación de comandos conjuntos y que era de competencia del presidente de la República. Además, manifestó que el delito no tenía nacionalidad y que se debían perseguir las conductas ilegales tanto de nacionales como de extranjeros por igual, y no encasillar a ciudadanos de determinada nacionalidad con el crimen urbano.
Frente a las declaraciones de la alcaldesa López, varias organizaciones de ciudadanos venezolanos en el país criticaron sus palabras, al considerar que con ellas podría estar generando que se presente casos de xenofobia en el país.
Las declaraciones de la alcaldesa tuvieron tanto eco, que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) dijo estar preocupada por el mensaje emitido por la mandataria.
“La CIDH reitera que mensajes y políticas públicas que califican a personas migrantes como delincuentes promueven estigmatización y animadversión de esta población, al culparlas de aumento de índices de violencia y criminalidad en los Estados”, trinó la comisión.
Luego de la lluvia de criticas a la alcaldesa, ella respondió que “la nacionalidad nada tiene que ver con la criminalidad, pero la impunidad sí incrementa criminalidad e inseguridad. Los criminales no van a hacer fila en migración para que los identifiquemos y judicialicemos. Tenemos que salir, identificarlos y capturarlos para judicializarlos”.