Los estudios sobre los beneficios de la equidad de género se han realizado por cantidades en el mundo. Hoy existen incluso metaestudios sobre el tema. Se ha comprobado que las empresas pueden ser hasta 26 por ciento más rentables con mujeres en posiciones de liderazgo o que la rotación de personal se reduce en hasta un 69 por ciento. Sobre estas cifras habló durante el foro María Adelaida Perdomo, CEO de Aequales, una consultora en temas de equidad de género. Perdomo aseguró que además de los beneficios económicos, cuando hay más mujeres en posiciones de liderazgo mejoran los estándares ambientales, sociales y de gobierno. “Cuando las mujeres constituyen al menos el 30 por ciento, hay controles internos más sólidos, menor riesgo de fraude u otras violaciones éticas, mejor entorno laboral, mayor compromiso y mejor reputación”, dijo. Esa relación entre representación femenina y transparencia la resaltó, precisamente, la presidenta de la Corte Constitucional, Gloria Ortiz. Para ella, aunque no hay estudios concluyentes, es muy diciente que el cartel de la toga haya estado conformado exclusivamente por hombres. Le recomendamos: “Solo hay equidad si la representación de las mujeres es del 50%”: presidenta del Consejo de Estado “Son excepcionales los casos de corrupción en la justicia donde están involucradas mujeres. No es una posición concluyente, pero lo que siento es que las mujeres somos más estrictas y eso quizás ayuda a evitar que se acerquen personas que no tienen buenas intenciones”, dijo Ortiz, asegurando que la corrupción de los jueces es la quiebra del estado de derecho. Junto a ellas dos, participaron en el encuentro mujeres empresarias, políticas, la general de la Policía Juliette Kure, emprendedoras, líderes sociales y artistas. María López, presidenta del Grupo Semana, quien contó su experiencia al frente del grupo editorial y del Festival Detonante, aseveró que en un mundo en el que las mujeres representan el 50 por ciento de la población, no habrá justicia si no representan el 50 por ciento de los cargos directivos. “Sin la visión femenina se queda corta la política pública de un país. Tenemos que ser partícipes del 50 por ciento de la toma de decisiones. Ya es hora de que seamos el 50 por ciento del poder”, dijo López, en desacuerdo con que hoy los cargos de liderazgo empresarial y político ocupados por mujeres no superen el 20 por ciento. Le puede interesar: "Es excepcional que las mujeres en la justicia estén en líos por corrupción": Gloria Ortiz Esa baja representación y la violencia que aún persiste contra ellas motivó el panel sobre políticas públicas en el que participaron Karen Abudinen, alta consejera para las regiones; María Claudia Lacouture, exministra de Comercio; Catalina Ortiz, representante a la Cámara por el Partido Verde; la general Juliette Kure, directora de Sanidad de la Policía, y Carmen Valderrama, superintendente de Transporte. Ellas se mostraron a favor de establecer políticas más fuertes de cuotas como una acción afirmativa temporal para que las mujeres tengan acceso a los altos cargos. Fue entonces cuando la representante Ortiz lamentó que el Congreso haya negado en tres ocasiones las listas cerradas con alternancia, que buscaban que los partidos inscribieran en igual proporción a hombres y mujeres intercalando sus posiciones, de manera que las corporaciones se conformen paritariamente. Ante esa negativa del Congreso, Lacouture invitó a las mujeres a que en las próximas elecciones utilicen su derecho al voto para escoger lideresas que le aporten una mirada femenina a la política y que trabajen en el empoderamiento de las demás mujeres de sus comunidades. Lea también: María López, Johana Bahamón y Adriana Lucía invitan a Colombia a "amar sus cicatrices" Pero ese empoderamiento pasa obligatoriamente por una mayor formación. No en vano, en el opinómetro que se lanzó durante la jornada preguntando sobre las acciones que deben tomarse para alcanzar la equidad de género, el 42,8 por ciento expresó la necesidad de una formación en liderazgo femenino. De esta manera, no solo se cambiará la vida de ellas, sino también las de sus familias y sus entornos. Un ejemplo de esto lo está realizando Belcorp, una multinacional que le apuesta al empoderamiento económico y social de las mujeres con su modelo de negocio y su fundación para el liderazgo. Como explica María Lizzy Massa, directora de Asuntos Corporativos y Legales, “esto les permite cumplir sus sueños, tener las mismas oportunidades y alcanzar independencia económica”. Esta acción es de gran importancia si se tiene en cuenta que, según el Banco Mundial, la violencia de género disminuye cuando las mujeres obtienen mayor autonomía económica. Este encuentro fue organizado por Foros Semana, Belcorp, Revista Dinero, Fucsia y Semana Sostenible, con el apoyo de Lenovo, Grupo Energía Bogotá, Pepsico, 3M y ONU Mujeres.